miércoles, 31 de enero de 2024

dacia maraini / si amando demasiado










si amando demasiado
se acaba por no amar en absoluto
yo digo que
el amor es una ficción amarga
esos ojos como velas
que pasan y pasan sobre olas de leche
¿qué se esconde dios mío
tras esos párpados azules?
¿un pensamiento de huida
el proyecto de un desafío
la decisión de poseer?
la nave de negras velas
gira ahora hacia occidente
corre sobre olas de tinta
entre rizos de viento
y gaviotas hambrientas
en aquel puente ya lo sé 
abandonaré un zapato, un diente
y buena parte de mí

***
Dacia Maraini (Fiesole, 1936)
Versión de Miguel Ángel Cuevas

/

Se amando troppo

*

se amando troppo
si finisce per non amare affatto
io dico che
l'amore è una amara finzione
quegli occhi a vela
che vanno e vanno su onde di latte
cosa si nasconde mio dio
dietro quelle palpebre azzurre
un pensiero di fuga
un progetto di sfida
una decisione di possesso?
la nave dalle vele nere
gira ora verso occidente
corre su onde di inchiostro
fra ricci di vento
e gabbiani affamati
so già che su quel ponte
lascerò una scarpa, un dente
e buona parte di me

martes, 30 de enero de 2024

maría marián / apuro de soñar contigo













Escribo y el lápiz me acompaña
en el apuro de soñar contigo,
con las velas al viento y los cabellos flojos,
con todo el decorado del lecho
y la sábana blanca y el temor dulce
de verme sin ropas,
oprimirme a ti, costado a costado,
y esperar en fragua el beso en la nuca
voltearme, tomarte la oreja,
que mi boca juegue con ella y
anhelar  que respondas
con el rojo de tus ojos
quemando mi tamaño.
Tal vez habremos llegado a las olas
más altas, a la torre, a la copa,
para lanzarnos veloces detrás del deseo
del amor hecho sauce.
¿Veremos qué tienes, qué tengo en el cuello,
serán tus ojos, tus brazos o todo tu cuerpo?
¿Y esa tierra de uvas ya es nuestra?
Quizá el vino no corra por las calles todavía,
ni la caña alumbre nuestras bocas.
Te espero amor, vino y caña,
con el temor del gusto grande, con el
vaso torpe y con la boca abierta.

***
María Marián (Huancayo, 1927)

lunes, 29 de enero de 2024

matías josé morales / tres poemas











Lagunas

*

Cuando llegamos al lugar, alguien
lo había acondicionado
para nosotros. Con delicado gusto
dispuso un par de gemelas
junto al mar.
Él —en su vanidad— ordenó
grandes pilas de rocas microscópicas.
Usando colores y composiciones
nos rodeó al protegernos del abusivo sol:

                                                un astro
                                                empeñado en latigar
                                                las motivaciones
                                                de admirar lo bello
                                                en silencio.

Bajo el árbol seco y su desinteresada sombra luchamos
contra los fantasmas de tu equipaje.
El mar no se hizo responsable esta vez.
Se volvió necesario trabajar en equipo
para construir una casa momentánea.
Fue difícil no quebrar varillas entre
oraciones de rabia infantil
y tus necesidades no resueltas
que provienen de aquellos años
donde un grito era el comunicar
más eficiente conocido después del humo.
Al mirar el lago junto a tu fuego
horas más tarde
ya relajado —y con la sangre fluyendo
a su debido ritmo— pude apreciar
belleza en la metáfora.
También su impertinencia, una playa
forma parte del agua dulce
y su laguna añora conocer
aquella espuma amarilla en la distancia.
Ese día no fui
perceptivo para comprender
lo que la naturaleza me dijo
no todo es dialéctica ni contrastes.
Mi cuerpo adelantado en la comprensión
de lo no dicho, sí lo entendió
y al igual que un niño
apunta con el dedo sus impulsos
te dio un trozo de lo que reposa
bajo el sol.

~

Pienso luego exploto
Parte dos: el desapego

*

Déjame acá / Entre tus ojos / Complemento
Somnífero / Putrefacción en el acto / Sufrir de placer
Codos secos / Trenzas de anís / Pegar mi piel
a la tuya / Calor / Color corporal / Primeras promesas
Siéntate en mi cara / Platos rotos / Contra tu espalda
Un ave bajó y me contó el secreto de los cables / Caminar
lejos de mí / Te dije: gracias por quebrarme / Nos vemos
Emoción arcaica llamada venganza / Fuiste lo mejor / Ébola
en la pista de baile / Seis latas / Propiedad depravada
Pedir ayuda por internet / Te dije: es la hora de mirar un reloj
Ciclos mensuales / Globos en el velador / Miedo
Te miro / Me miras / Depilas mis axilas con los dientes
Me dices: eres portal orgánico / Rociaré tu ADN
por la habitación / Cuchara de madrugada / Googleemos
nuestra muerte / Más allá / Miro mis nalgas / Me dices:
dame tres días y te destruyo / Los pechos se repiten de diez
en diez / El engaño al dormir / A tu lado solitario
Pienso luego exploto / Jadeos / Juegos frontales / Honestidad
momentánea / Amor en fracciones del policarbonato
Cierra la puerta y la boca / Y digo: La rabia es una forma
metafísica de llorar.

~

La civeta

*

Se podría decir que el universo
tiene aspectos crueles en su composición
 
y que siguiendo la rutina de toda esfera
la orientación del observador varía
el juicio sobre las manzanas
pudriéndose en el suelo
 
Enjaular una civeta
durante su vida útil
 
para que el flujo del grano
al bajar por el tracto intestinal
otorgue un sabor que concuerde
 
con la expectativa puesta
en el café consumido por un par
de ejecutivos en Wall Street
luego de provocar el colapso
económico en Islandia
que llevó a miles de personas
a la banca rota o al suicidio
 
es algo realmente
dañino y complejo
aunque no tan grave
—si lo piensas— en comparación
al sacrificio llevado a cuestas
 
Nos decimos adiós para siempre
y le debemos gratitud
a una pila de cuerpos.

***
Matías José Morales (Talca, 1988)

domingo, 28 de enero de 2024

juan de la fuente umetsu / de "la belleza no es un lugar"










Casa

*

He aquí la noche
que cae
dentro
de la noche
en la que
habitas tú
que sólo
eres el día

~

Jardín

*

Un lugar
donde la flor
descubrió que era sombra
y la sombra
descubrió que era flor.

~

Exordio

*

Solo lo humano permanece

Solo aquello que se hunde y se salva
Solo la estrella que fuga de la noche
                        para encontrar tu piel
Esa estrella que vi hoy
como se ven las cosas que no existen

Un lago en tu ventana,
una palabra en tus zapatos
el sordo caminar del tiempo
por todos tus caminos

Solo lo humano sobrevive

Tu nombre sabe irse
porque aprendió a quedarse

~

Pessoa

*

Perdido en tu niombre
como en una casa ajena
voy
llego
regreso

He conocido esta palabra / Me he convertido en ella
Enloquecido, he partido nuevamente
He vuelto a una casa
Pero no sé tu nombre

~

Primera historia

*

Cuando te veas ir, abrázate
Cuando te veas llegar, arrójate
El tiempo no es aquel que atraviesas
Es un río que lleva tus huellas
Y te las entrega cuando ya no son tuyas
El tiempo es mentira
Hazle saber que tú eres tu propio río
Y que se vaya solo

~

Tilsa

*

Olías a jazmín - como tu sangre
y un viento de piedra se apoyaba
en tu vuelo

Era abril cuando la luna

Y de tu vientre de agua
emergía un rostro

                    No lo vimos
                    No lo quisimos ver

La batalla fue en abril

Cuando la luna
huía de la luna

~

Golpe de agua

*

El agua es lo que crece, se marcha, te alcanza
El mar está lejos y el río es una pregunta incierta
Queda el éter, el misterio, la palabra escindida, arrodillada
Y de los pliegues de la noche, solo te salva el adiós
Ese adiós que juzgas imposible hoy, cuando las mismas
huellas de una historia ciega te conducen

Eres el mismo de antes y no te reconoces
Porque ser el mismo de antes, después de tantos años
es el verdadero adiós / Te has ido y te has quedado
En el agua ensayas una respuesta
El río ha regresado a tu puerta / Tu casa permanece
en el mar / Aquella que ha nacido al comienzo del día
te habla ahora / Pero sus palabras están secas
Te precipitas en el sueño / Con palabras húmedas
recoges tus pisadas / Te sumerges
Navegas en tu corazón, mientras despiertas

~

Final desde el principio

*

I

Una voz me suena adentro / Muy adentro
Y habita una montaña frente a mí
Una voz me suena afuera y sin embargo
está cerca de mi corazón, río que corres
a buscarme desde algún lugar de Dios
En alguna pradera indescifrable
En algún símbolo de arena que el olvido arrastra
Y esa voz es mi voz
Para no escucharla / Para no seguirla
Para levantar la ano y gritar:
¡Soy el culpable, vengan y llévense estas palabras
                porque estoy completamente lejos de ellas!
En mi voz ya no caben                            No caben más
Salvo el silencio
                                 (Sí. Tal vez    un poco de silencio)

II

¿Quién recoge una palabra suya    y la guarda
como si fuera ajena?        ¿Quién recoge su voz
y nos habla con la voz del otro?        ¿Quién se entrega
como si fuera a escapar,
y en verdad escapa, se abraza a su cuerpo,
se entrega a precipicios infinitos
y llega hasta tu casa sin que lo sepas?
Te sorprende, se sienta a tu lado,
conversa con el tiempo y hace agujeros en la noche
por donde sale el día
                                                Se desborda de sol
Y cada esfera es una puerta más que se abre

Junto a ti están las flores que nacen
(pero no son flores sino letras despiertas)
No son letras sino sílabas que se abren
Balbuceos cruzando el puente que te trae
a nosotros esta noche
Exilio de una multitud
entre la multitud                            (abierta de par en par)
Y un hombre solo frente a la oscuridad:    efímero fuego
                                                                   (que no acaba)

III

Donde los árboles son de aire y una mano
los separa de la tierra para encerrarlos en
la luna

            Allí encontré tu corazón
            hecho de montañas y cenizas
            Bajo la noche y bajo el día
            El mismo día y la misma noche
            del firmamento

Y todo fue caos que amanece
Utopía de cuerdas que nacen de la muerte
                                            y la trascienden
Miradas por todas partes como lagos perdidos
Y tú dijiste: también hay voces por todas partes,
oídos que nos callan y no nos escuchan más
                                                        Así dijiste

Esa fue la primera
y la última palabra pronunciada
antes que reinara el silencio
Llego de lejos a ver esta parte de la historia
que no viví y otros vivieron por mí
Ellos abrieron una puerta en el muro
Amansaron al fuego con caricias
Cayeron para levantar al mundo

Y a donde voy me acompañan

IV

Comienzo al revés: 
Desde el final que no he tenido
Desde el nacimiento que no tendré
Comienzo y acabo lo que no tiene cielo
cieno / historia / histeria / término - palabra
que sucede y vuelve a ocurrir años atrás
como una nube que pasa    se queda contigo
y duerme, para soñar esa ola detenida en el éter
pronunciando tu corazón que no termina
porque jamás empieza
En tus venas circunda otro mundo
Una palabra ciega muda y sola
que no llega a pronunciarse pues nada dice
                                    y a la vez lo dice todo
Sobre tu mesa desierta o sobre el desierto de tu mesa
la palabra que pronuncie será tuya
Pero nunca estés seguro                  Aguza tu mirada
y sígueme en la noche porque cuando hayas llegado
no estarás estará ella: la palabra    La que te inventó

~

Constataciones

*

Cuando una voz se cae
es porque ya no es de nadie

***
Juan de la Fuente Umetsu (Lima, 1963) La belleza no es un lugar. Lima: Carpe Diem Editora, 2010.

sábado, 27 de enero de 2024

legna rodríguez iglesias / querida lluvia









Soy hija de Engels.

También soy escritora. Escribo un libro de cuentos.
Quizá lo lea cualquier gente. La condición es que quiera.

El tío Marx tiene una máquina de escribir. Me
prometió que cuando se quitara la barba sería mía. Aunque el tío Marx
adora su
barba.

Papá tiene otra máquina de escribir. Pero está rota
y arreglarla cuesta al menos un montón de publicaciones.

(... )

Papá y mamá se están separando.

Antes, a mamá le gustaba que papá la llevara a ver
puestas de sol, y a papá le gustaba que mamá le comprara gel para el pelo.

Ahora papá ya no invita a mamá porque dice que es
invierno. Y mamá le responde que siempre ha existido el invierno y las puestas
de sol nunca se han terminado. Y papá continúa con eso de que este invierno es
auténticamente extraño. Entonces mamá resuelve no comprar más gel para el pelo.
En realidad mamá no
puede vivir sin las puestas de sol; y papá no puede vivir sin su gel;
por lo que yo no puedo vivir sin mamá y papá.

Han llegado juntas la noche y Tú.

Papá busca su paraguas. Mamá tiene ganas de llorar.
Papá también tiene ganas de hacerlo, aunque el paraguas le tape la cara.
Entonces mamá se arrepiente y se saca de la manga un gel para el pelo. Papá
guarda el gel en su bolsillo y sonríe asomando una puesta de sol.

***
Legna Rodríguez Iglesias (Camagüey, 1984)

viernes, 26 de enero de 2024

caterina scicchitano / un poema











¿Estoy exagerando? Sí, pero con razón.
Huir de Latinoamérica sería renunciar al amor.
Yo quiero quedarme acá.
Necesito seguir en este país para ver
en que culmina esta violencia.
Vos no lo entenderías.

***
Caterina Scicchitano (Mar del Plata, 1992)

jueves, 25 de enero de 2024

rossella di paolo / de "la silla en el mar"










Escribano aureolado

*

En ferocísima nada tú
sin manos
para coger el día
(ni pies tampoco ni boca ni oídos)
tú sin lloros
tú hechizado
tú clavado cimentado y
enlucido
tú las calles sin salida
        las puertas condenadas
tú los arcos cegados
        las ventanas tapiadas
tú el muro
tú el muro
aureolado penitente
piedra en pecho duro duro
ni una brizna en tu reino
pasa el viento pasa el otro
sin un cielo.

~

Una mujer contra el muro

*

Cerrado a piedra y lodo a cal y canto
en cruz y escuadra resguardado
cómo he de encontrarte nunca
por no verte mis ojos no los tengo en la cara
mis pechos tampoco lejos de tus manos
y sin tus manos ninguna mía alcanza algo
menos las piernas por más desvelos
que ya la tierra sola me camina encima
la inmensa tierra herida
abierta por tu falta.

~

Cripta

*

Te sacaría de la siesta de vivir muerto
si conociera la mano que sujeta las manecillas
de tu corazón sol de piedra campana de piedra
tu boca no se abrirá al aire de mi boca
me levanto me arranco el polvo un poco la pena
y camino cómo camino lejos de ti...

~

Una casa

*

Déjenlo jugar a la pega inmóvil solo
o contar contra la pared hasta
hasta que no quede nadie
capaz de esconderse de algo
de salvarse de algo ya déjenlo
hacer el muertito parado
echado en el pasto en el piso
quizá esté contando ladrillos
ovejas en la boca del lobo para dormirse mejor
un ladrillo saltando de unas manos a otras manos a otras
otro ladrillo saltando de unas manos a otras manos a otras
hasta la casa donde todos íbamos a ser felices
si no hubiésemos sido nosotros
pero teníamos que ser nosotros
ahora o nunca terminamos la casa
nunca termina la casa
de caérsenos encima.

~

En la piscina

*

Un cuerpo
largo
triste
bracea
en el cielo
desnudo
del agua
un brazo frío
y otro brazo
los ojos abiertos
quietos
en el quieto
fondo
de losetas.

~

Retiro

*

                    A Tilsa Tsuchiya

Una lengua anudada a otra lengua
no es silencio
ni la tortuga con túnica de piedra
ni el pez en su nube
los brazos no brazos
los muñones
portones
que clausuran.

~

Rincón

*

Densa
silla
abierta
detiene
el mar
la tierra
las estrellas.

~

Costa

*

            (vayamos por la sombra)

Qué orillas las sombras
cuando el sol ahoga
y eso eres: sombra
y a esa voy
braceando en brava luz
aturullada
quiero alcanzar el flanco negro
de la luna
tocar el borde justo de tu manga
tenderme
en esa tierra inmóvil
que es la sombra de un
hombre
vaciado de su sueño.

***
Rossella Di Paolo (Lima, 1960) La silla en el mar. Lima: Peisa, 2016.

miércoles, 24 de enero de 2024

maría elena blanco / dos poemas













Resaca

*

(soneto con coda)

                                        A Antonio Cisneros,
                                        in memoriam

Vómitos, reflujo, asfixia, atoro.
Cero inspiración. Tos. Depresión.
Seis de octubre, casi estoy que lloro
pero es hora de tomar mi infusión.

Tras la duermevela de resaca
estiro el tiempo y me asalta un cuadro
en lo espeso de la noche flaca.
Esto es crisis. Casi estoy que ladro.

El reto de setentiún sonetos
lanza un jaque mate a la suerte.
Recoge el guante o muere, poeta,

A ver si la escritura es más fuerte
O si las Moiras te tienden una treta
y no garabateas ni un cuarteto.


Coda

Amanece y encuentro en el diario
un artículo de Héctor Manjarrez
sobre el vate desaparecido

cuatro años ha, un seis del diez:
Soy el Cisne Negro y he venido
a salvarte en mi aniversario.

~

Estela

*

Esta razón que rige eternamente el hombre no comprende
ni antes de oírla ni una vez oída:
así escribió en Éfeso
Heráclito
el Oscuro
Eurípides (el Trágico) la señaló a Sócrates
que hidalgo
la admiró
y luego legola a nuestros días
Diógenes
el Cínico
(previo erudito comentario de Teofrasto
y hasta de Aristóteles).
La ambigua parábola reza
que el dios es noche y día
guerra y paz
hambre y hartazgo
(uni/rivalidad de los contrarios
inmanente a su ser)
                                   mudable
cual incienso
que al abrasarse en una u otra esencia
deriva su nombre
                                   de la nueva embriaguez
(la identidad es flujo entre dos aguas
soplo
entre brasa y llamarada)
                                   pues el mundo
siempre fue
            es y será
                        fuego
y el alma
rediviva
un tenue
inagotable
hilo
de humo.

***
María Elena Blanco (La Habana, 1947)

martes, 23 de enero de 2024

roberto yáñez / de "poemas trizados"









Es más real
la conversación de los adolescentes del barrio 
que mi poesía 

es más real 
el pago mensual de los que retiran la basura 

es más real la irrealidad del mediodía que el argumento de los antiguos 

si buscas realidad 
apártate de ella 
decía el indio Juan 
frente a una polvorienta casa de México 

es más real 
el pecado que el perdón 
la crucifixión que la resurrección 
mi poesía es tan irreal 
como la de cualquier poeta

~

Una vez estando en América 
en un monte bañado por el mar 
que desborda el camino de los esqueletos vendados de los siglos 
estando en el deber del río 
que es el deber 
de los que cargan agua
para regar el siglo que vendrá

***
Roberto Yáñez (Berlín, 1974) Poemas trizados. Sevilla: Ultramarina, 2020.

lunes, 22 de enero de 2024

antónio manuel couto viana / cuatro poemas













Dieciséis años, tal vez

*

Dieciséis años, tal vez.
La veo, en el café, cada mañana,
Ojeando, atenta, un compendio de inglés,
Con un perfume a Escuela y a manzana.

No me canso de mirarla. A veces, mira
(¡Un viejo!), en un desvío de atención,
Y luego pasa la página,
Mientras moja
el bizcocho en el «galão» (1).

Yo salgo, con pesar, bebida la «bica» (2)
.

Ella es mi mañana,
Tan natural, tan clara... que ahí se queda.

- ¡Qué nostalgia de la Escuela! ¡Qué hambre de manzana!

N. de la T.
(1) Café con leche.
(2) Café solo.

~

Piedra tumular

*

Mi generación se escapó de la guerra,
Por eso la paz que trae no tiene sentido:
Está hecha de ignorancia y de castigo,
Tan rígida y tan fría como la piedra.

Se les deshacen las manos en gestos frágiles,
De una verdad inútil por vacía,
Y la lengua inmóvil le niega el sonido a la vida,
Por hábito o por falta de valentía.

Si hay rumores ahí fuera, a veces, recuerda:
¿Por qué late el corazón del mundo,
Precipitado, angustioso, ardiente?

Pero deprisa se sumerge en la indiferencia
- Que le dieron un túmulo seguro;
Y el reloj le da las horas ciertas, siempre.

~

Es tarde

*

Futuro, he pasado la edad
De pasar a nuevo rumbo:
Preso en esta sociedad
Me consumo.

¿Todavía me restan restos
De poesía y de valentía?
No sirven para manifiestos
Ni mensajes.

Se irán en la próxima bandada,
Cuando el pan sea raro y vago.
Después, en el hambre de la tiniebla,
Tiemblo y callo.

Futuro, ¿qué quieres de mí?
He cerrado para demolición
Escribo fe, leo fin.
Y tú no.
— 2 de mayo de 1970 —

~

Interior

*

Detrás de los muros de nuestra casa
Estamos tao juntos que nos tocamos:
El viento es brisa y la brisa es ala.
Detrás de los muros de nuestra casa
Todos los frutos se quedan en las ramas.

Vivamos, pues, dentro de nosotros,
Dejando a los otros el gesto y la voz.

3-noviembre-49

***
António Manuel Couto Viana (Viana do Castelo, 1923-Lisboa, 2010)
Versiones de Raquel Madrigal Martínez

/

Dezasseis anos, talvez

*

Dezasseis anos, talvez.
Vejo-a, no café, cada manhã,
A folhear, atenta, um compêndio de inglês,
Com um perfume a Escola e a maçã.

Não me canso de a olhar. Às vezes, olha
(Um velho!), num desvio de atenção,
E logo volta a folha,
Enquanto molha
o bolo no «galão».

Eu saio, com pesar, bebida a «bica».
Ela é a minha manhã,
Tão natural, tão clara... que ali fica.

- Que saudades da Escola! Que fome de maçã!

in Café de Subúrbio

~

Pedra tumular

*

A minha geração fugiu à guerra,
Por isso a paz que traz não tem sentido:
É feita de ignorância e de castigo,
Tão rígida e tão fria como a pedra.

Desfazem-se-lhe as mãos em gestos frágeis,
Duma verdade inútil por vazia,
E a língua imóvel nega o som à vida,
Por hábito ou por falta de coragem.

Se há rumores lá de fora, às vezes, lembra:
Porque é que pulsa o coração do mundo,
Precipitado, angustioso, ardente?

Mas depressa submerge na indiferença
- Que lhe deram um túmulo seguro;
E o relógio dá-lhe horas certas, sempre.

in Mancha Solar

~

É tarde

*

Futuro, passei a idade
De passar a novo rumo:
Preso nesta sociedade
Me consumo.

Ainda me restam restos
De poesia e de coragem?
Não servem pra manifestos
Nem mensagens.

Irão na próxima leva,
Quando o pão for raro e ralo.
Depois, na fome da treva,
Tremo e calo.

Futuro, que queres de mim?
Fechei pra demolição
Escrevo fé, leio fim.
E tu não.
— 2 de Maio de 1970 —

in Pátria Exausta.

~

Interior

*

Por trás dos muros da nossa casa
Estamos tão juntos que nos tocamos:
O vento é brisa e a brisa é asa.
Por trás dos muros da nossa casa
Todos os frutos ficam nos ramos.

Vivamos, pois, dentro de nós,
Deixando aos outros o gesto e a voz.

3-novembro-49

in Távola Redonda

domingo, 21 de enero de 2024

michelle cliff / pasar










Yo pensé que era solo la pérdida de la madre-
pero era también la pérdida de otros:
los que se criaron para trabajar para nosotros
y se paraban en el portal mientras
la tele estaba encendida
y se paraban en el portal mientras nosotros contábamos historias de fantasmas
y planchaban los paños de las bandejas de té. 
Pero esta división existía aún entonces. 

Pasar demanda un deseo de volverse invisible. Una vida fantasmal. 
Un ocultamiento de las conexiones

***
Michelle Cliff (Kingston, 1946-California, 2016)
Versión de Lucía Stecher

/

Passing

*

I thought it was only the loss of the motherbut
it was also the loss of others:
who grew up to work for us
and stood at the doorway while the tv played
and stood at the doorway while we told ghost-stories
and ironed the cloths for the tea-trays,
but this division existed even then.

Passing demands a desire to become invisible. A ghost-life.
An ignorance of connections

sábado, 20 de enero de 2024

cecilia vicuña / dos poemas










Carlorubindo antes de los 10 años

*

Esta era una pequeña alemana bizca
luego de masturbarte una semana
saltas la reja de fierro
y la haces acostarse
no hay nadie en la casa
primero se sube el vestidito
y luego se baja los calzoncitos
y la alemancita quietamente
se deja acariciar las nalgas.
“Bajemos la persiana verde,
no le digamos a nadie,
volvamos por Guillermo Franke.”
Después de todo, en el futuro
uno cumple 10 años y le dice a la alemana:
“Tiéndete de boca” una alemancita bizca
de pelo gris, sin mucho ni poco,
una carne blanca y después la confesión
para poder hacer la primera comunión.

~

Mascarón de proa

*

Delfín de tendones estirados
te vi haciendo gimnasia
y soñé que el viento
me hinchaba la columna
vertebral.
 
Mascarón de proa
de un barco viajando
a toda velocidad.
Me tensas como un arco
y entra la flecha
disponiéndose a volar
en el punto máximo
de tensión.

***
Cecilia Vicuña (Santiago de Chile, 1948)

viernes, 19 de enero de 2024

bethoven medina / cuatro poemas












Ante plumas de pavo real

*

CAPARAZÓN que cogí
al nacer del murmurar en carnes y estruendosas formas
no sirves a mi propósito de fugar de la torre de mis cinco sentidos
así fuera pájaro el cual dialoga con el nogal

Cuerpo avergonzado umbral –faro de puerto- Caparazón
y toda tu cadena de palabras que entusiasman cigarras
                y alas de mariposas

Cuerpo que me contienes
te dejo aquí en tu ataúd oliendo a incienso

Compadécete de los vivos que lloran mientras subo escaleras
cuando tú caparazón pierdes luz pasos y caminos
               te tengo compasión cuerpo
ante plumas de pavo real que es el destino incierto.

~

IMPLORACION DE UN JILGUERO

EN CENTRO DE LA CUITA

 

*

Encuentro en el extremo romper de la raíz, la causa,

Sor Tristeza, tú que mejor lees a la izquierda del Sol.

 

*

Os imploro a orillas del mar contaminado, en perfil de gratitud,

aleja el vil destrozo del hábitat, ballenas y focas, así lo solicitan.

 

*

De los gestos radiantes de la luz sobre esta casa ecológica,

se consigue la flora de la posibilidad, otros días más para vivir.

 

*

Gran Arquitecto del Universo, no abandonéis tus criaturas;

al temblor de jalcas y entre matorrales protege conejos silvestres.

 

*

Es el orgullo de las azucenas el que emociona a mi humanidad,

y feliz ansío el tacto de la raíz del sol, causa y efecto.

 

*

El afecto con devoción a la Natura

cantando la libertad de lo posible.

 

*

Árbol Hombre, en conjuro la selva implora en un tañer  vegetal

la no contaminación; también el mar, el viento y la conciencia.

 

*

Amistad de sentirme contento, latido que encerró la vida en mí,

hermanos de mi diseño, de esta pena y afilada flecha.

 

*

Adjunto momentáneos óleos del paisaje; así oleréis el incienso

cuando atravesemos el Jordán y rondemos las viñas del Señor.

 

*

Armonía que enarbolas los sentidos al despojo del tránsito,

todo espíritu, ente solar, imploro en acción y reacción.

 

*

Implora un jilguero ante leños ardiendo del sauce, pino y caoba;

no a la deforestación, sólo sirva la madera para cofre óseo. 

~

RECONCILIO A LO RESECO

INSURGENCIA LLAMATIVA

 

*

A veces ni sé de mí, sino de la angustiosa fiebre cotidiana,

y así despertar mirando el levante que todo lo aclara.

 

*

Te conozco Mundo, nervio entretenido, ardor en mi poro,

desordenados continentes en tu rotación, globo terrestre y ozono.

 

*

Realidad, grabada en micras donde mis manos dan su presión,

y los deshielos invaden suburbios que decoran riscos y las colinas.

 

*

Reflexión en reconcilio de la otrora verde esperanza vegetal,

ante la proclama de los niños que nacen en insurgencia llamativa.

 

*

Existencia, templo donde la campana suelta sus pájaros sonoros,

y la soledad se divide entre sí, en azucenas viejas.

 

*

Eres el rostro del día depositado en las alboradas.

Existencia, en mis pómulos signas el paso de los años resecos.

 

*

Me conoces como el mar sobre el que pende la azarosa tormenta,

y vengo irreverente desde las rocas a las olas sobre las mareas.

 

*

Te pienso en el ocaso, cuando el sol cae en lontananza,

espléndida naranja que el infinito deja caer de sus manos.

 

*

Es la nueva infancia la cual convoca a un nuevo amanecer,

desde el  sabio diálogo de la cucula enalteciendo su destino paloma.

 

*

Os dije Mundo, mientras organice mis días y zarpe al mañana,

brillará mi alma, abierta flor de corpulencia nazarena.

 

*

Recibiré mis afanes en el reconcilio, en hondura y  vitalidad,

y volveré cual nave a saludar el puerto enorme de la búsqueda.  

CONCIERTO FLORAL

REGRESO DE LA VISION

 

*

Invernales bosques de ciprés surgen  bajo el sol relojero,

y los días, son espinas que crecen entre los zarcillos.

 

*

Desobedecen la paz de los jacarandás,

con la indiferencia de la rosa del amor que el picaflor rapta.

 

*

Cuando ha llovido toda la noche ,

se evidencia la calmada sed de los pétalos de la flor de Cantu.

 

*

Descolgué por la escalera del vacío en regreso de la visión,

a mi Profundo, a mi dócil silencio y ante la primavera.

 

*

Leí tus ojos, cartilla de infancia, girasol sorprendido,

volviendo al concierto floral: la margarita, el clavel y el gladiolo.

 

*

Aquellos modales de la Natura,

desnudos por la garúa y súbditos de la luna blanca y circular.

 

*

Es nuestro hábitat, señales de alquimista y crisol de utilidades,

mientras surca el sol al aire en el infinito, bendición de solsticios.

 

*

Los mangos empiezan a florecer, los pájaros trinan inéditos,

y regreso con la visión de hacer de mi vida una estación con luz.

 

*

La alegría continúa en mi pensamiento como nido de ave fénix,

y los olores de los floripondios me ennoblecen, elogio a mi edad.  

 

 *

Niña realidad, pequeña eres ante el enigma de la madre Natura,

así he visto el saber que supera lo inmediato,  lámpara en vigilia.

 

*

Mi conciencia del Eterno, atrae a mi fe al concierto de auras,

y cada individuo con su color que proyecta desde eje de energía.


***
Bethoven Medina (Trujillo, 1960)
Envío del autor

jueves, 18 de enero de 2024

erica jong / libros










El universo (que otros llaman la biblioteca)
Jorge Luis Borges 

Libros que están cosidos al centro con hilo blanco grueso
Libros en la playa con páginas coloridas y lentes de sol
Libros sobre comida con imágenes de pomelos exprimidos
Libros sobre pan horneado con orillas marrón
Libros sobre franceses pelucones con páginas sin cortar
Libros de grabado erótico con páginas que se pegan
Libros sobre posadas cuyas estrellas se apagaron
Libros sobre luminarias rodeadas de oscuridad
Libros con páginas en blanco y márgenes impresos
Libros con maniáticas notas al pie sin formato
Libros con piojos de libros
Libros con papel de arroz pegado
Libros con hongos de libros creciendo entre sus páginas
Libros con páginas de color encuadernadas con piel y carne
Libros de hombres enamorados con la letra O
Libros que huelen a tierra al ser hojeados

***
Erica Jong (Nueva York, 1942)
Versión de Nicolás López-Pérez

/

Books

*

The universe (which others call the library)
-Jorge Luis Borges

Books which are stitched up the center with coarse white thread
Books on the beach with sunglass-colored pages
Books about food with pictures of weeping grapefruits
Books about baking bread with browned corners
Books about long-haired Frenchmen with uncut pages
Books of erotic engravings with pages that stick
Books about inns whose stars have sputtered out
Books of illuminations surrounded by darkness
Books with blank pages & printed margins
Books with fanatical footnotes in no-point type
Books with book lice
Books with rice-paper pastings
Books with book fungus blooming over their pages
Books with pages of skin with flesh-colored bindings
Books by men in love with the letter O
Books which smell of earth whose pages turn

miércoles, 17 de enero de 2024

manuel morales / cuatro poemas













Testimonio para recordar un gran amor

*
 

Y fue entonces que escuchamos La Voz

“Tu amor se consumará

sobre las hojas secas

y el otoño. Y tu amor no será vil”.

Y así anduvimos miles y millones de años.

Prendidos y resplandecientes

 rodeados de mitos

bajo una nebulosa de signos cabalísticos / aún pudimos observar

la destrucción del mundo bajo una claraboya.

En algunos lugares la yerba

era esbelta como un salmo

y los hombres animales tranquilos

concientizados por los astros /

la naturaleza.

Otras veces la noche nos empujaba

hacia el suicidio colectivo

y yo recogía conchas y piedrecillas del mar

tratando de ahuyentar la visión de los campos devastados

de Viet-Nam

los cuerpos mutilados /

las almas mutiladas /

y ese maldito olor a mierda de la guerra.

Y siempre escuchábamos La Voz.

A veces después de estar años tras años

enterrando muertos

nos deteníamos junto a un río para hacer el amor

sembrar algunas flores

para leer concretamente al viejo Ezra Pound.

Entonces yo gateaba hacia tus pies

besaba tus rodillas

los muslos como un árbol de miel

y esa rosa perfumada desde donde sale

la vida. Y era un niño / júbilo & gozo /

acariciando y mordiendo tus pezones

como el labriego acaricia y hunde su pala en la tierra. Después

era un perrito. Un perrito husmeando las posaderas de su hembra

hasta culminarte regada por la savia infinita del amor.

Y me mirabas mucho

porque nuestra desnudez era más radiante

que la revelación mosaica

y que todas las hogueras que un día se prendieron

sobre el mundo

aun cuando la nieve era azul y el viento

un caballo ronco.

Un día escuchamos La Voz con mayor intensidad.

Fue algunos meses después de que nos encontramos

fresas silvestres y vimos por primera vez

a una pareja de pájaros haciendo el amor

sobre la rama de un gran árbol de manzano. Y los campos

que eran amargos

y las hojas

 y los frutos

 y el viento

amargos

cambiaron porque en sus entrañas algo crecía

como el trigo en un campo bueno

como la luz cuando los polluelos rompen el huevo

y respiran la belleza del aire

y del sonido.

Solo que súbita La Voz se extinguió.

Y lo que hubo de brotar solo fue pasto muerto.

Y era como intentar encontrar la identidad de las cosas

cuando la oscuridad y el planeta

nos avientan cuestionados

a podrirnos de hastío en una permanente soledad.

Y lo que hubo de brotar solo fue sangre muerta.

Y desde entonces la cólera se irguió

sobre mi frente

al volver después de enterrar a nuestro hijo

durante III años

lloramos juntos y bebimos

como nunca lo habíamos hecho.

Y comprendí finalmente que la había amado mucho

y que en tan poco tiempo habíamos envejecido juntos.

Y decidimos separarnos para siempre.

Para siempre.

Y nuestro amor no fue vil.

~

Cobardía

*

No sé, francamente, qué hacer con esta obstinada cobardía.
Cuando a veces creo haberme despojado de ella
arrojándola contra las rocas, en la noche
siento que yo no soy y voy en búsqueda
de su dulce y perversa compañía.
 
Por eso no es raro encontrarme en los acantilados
hablando solitario con las piedras
en busca de objetos perdidos
o de rosas que el destino hace tiempo despojó de memoria.
 
Ustedes seguramente creen que estoy loco. No, no,
soy simplemente un hombre que no acepta
la realidad terrible del desamor

~

Newborg

*

Muchas veces pienso que aquella era la ciudad más pálida que ya conocí.
Localizada en las afueras del mundo, con un viento y un sentimiento
extraño que deterioraba las rosas petrificadas o los párpados de sus
calles. Parado en una estación solitaria yo buscaba una muchacha, de
esas que no resisten la tristeza de los viajeros, apenas para ofrecerle
mi corazón y mi piel. Sé que ustedes pensarán que estoy mintiendo,
pues mientras la besaba y le apretaba uno de los pezones le pregunté
su nombre. Ella me respondió: “cualquier nombre me es igual, pero
puedes llamarme o fingir que me llamo Greta Garbo”. Fue como si
una flauta reseca se quebrara en mis manos y las ocultas fuerzas de los
elementos nos dejaran podridos de exilio con una flecha atravesada
en la memoria llorando por nuestros pecados junto a la hierba. Bajo
la tarde la ceniza de su voz era una irresistible soledad. Y vi tantos
tatuajes sobre su cuerpo que tuve vergüenza de estar desnudo y ser
cremado por él. Nunca más volví a verla. ¿Qué cosa me recuerda
ahora la muchedumbre que encontré en sus ojos? Bello cuerpo de
lluvia donde los pájaros fornicaban bajo un sol de primavera, ¿quién te
bautizó con ese nombre de guerra?


Oda a mis enemigos
 
*

Vivo siempre en sobresaltos, me acusan a diario
de ser un avezado ladrón de gallinas, de excéntrico,
de restallar, de crujir como un mero lobo disfrazado de oveja
para seducir a las inocentes novicias de cabellos negros.
 
Peor aún, andan diciendo que soy un tipejo radiactivo,
            lleno de vientos, huracán
de lascivia corrompido por el trago, la cutra y la modorra,
que no tengo noria ni rumbo, en otras palabras,
que soy más barato que alpargata de argentino. Pura bamba.
 
Algunas veces ya me asociaron al narcotráfico
o hablan que vendo armas para las FARC y Sendero Luminoso,
que soy un eminente peligro andando, un tremendo tramposo
y cuando muera seré enterrado en un ataúd de lata.
 
Pura envidia, a mis enemigos fulleros no les gusta
que yo sea un luchador social con una concepción política del mundo,
un poeta que vive en el aire y en las gracias de las muchachas.

Enojados como hienas odian mi esplendor. Y les jode, sobre todo,
mi desprecio.

***
Manuel Morales (Iquitos, 1943-Porto Alegre, 2008)