lunes, 6 de junio de 2022

tânia tomé / cinco poemas













Sonidos al unísono

*

La mano que me lee
gana en el espejo
la pupila
de una luz inmensa
en el fondo de la concha.
Es lo que se me ve(n) más allá
de la cotiledón de la piel:
sonidos ruidosos
al unísono.

~

Simiente

*

Y si Paul Celan
me entrase
aquí, en el futuro verso
yo sería la flor
tú serías la muerte
y no te escribiría
en este deseo
incierto
de morirte
como marchita la flor
para ser simiente

~

La palabra

*

La palabra quiere acostarse
solita, reflexiva
contemplar despacio
el sol muere al silencio
No hay prisa, no hay miedo
La palabra quiere morir
las veces que haga falta

~

Si mi pescador me pescase

*

Si mi pescador me pescase
con el arpón me agarrase los versos
uno a uno, sin prisas
la mejor palabra del mar...
Pero, ¿en qué lugar del ala
la palabra podría ser más bella?
¿Con qué olor? ¿Con qué sabor?
¿Dónde sería el lugar del sol
¿Con qué color? ¿Con qué brillo?
Y sé que he de escoger
deprisa pero despacio
la palabra más carnosa para comer
Y voy a comer intensamente
Con toda la hoz de mis (di)entes
en la punta de los dedos
las palabras que no me callo
Y un pez con alas
Ha de nacer
Y ha de pescarme en lo alto
el pescador
Espero

~

África Inexplorada

*

Yo soy la parte de toda África
Todavía inexplorada
Donde batuque
Se auto-musica
En el rocío terrestre
En las aguas todavía desnudas
Que recorren la mutación
De las sabanas y de las pestes
Yo soy África todavía pura
Que en sus campos vírgenes
Todavía adora al sol
Y lo canta pentatónica
Con la felicidad de existir
Soy África en cada pedazo de mí
Y cada pedazo de mí existiendo
Mupipi sobrevolando el grano
Urdiendo el cántico litúrgico
De la utopía en las simientes
Marrabentando el futuro
Con el mismo sol desdén
De las acacias y de las palancas
De las palmeras alcanzando el cielo
Eco ritmando el misterio y el hechizo
De la madre ventreando la tierra una
Y de la mano carne y alma de mujer
Yo soy la África profunda
En los montes e islas
Que claman a los cuatro vientos
Del sueño y de los horizontes
Que se nos escurren entre los dedos
En el descrédito de los desiertos
Y de las rocas olvidadas
Soy yo África fecunda
Que te escribo
En el sabor del lirismo que nos une
En la poesía de los pueblos
En este exotismo de ansias
Que nos sueña
Parte de África todavía inexplorada.

***
Tânia Tomé (Maputo, 1981)
Versiones de Raquel Madrigal Martínez

/

Sons em uníssono

*

A mão que me lê
ganha no espelho
a pupila
de uma luz imensa
no fundo da concha.
É o que se me vê(m) além
da cotilédone da pele:
sons ruidosos
em uníssono.

~

Sermente

*

E se Paul Celan
me entrasse
aqui, no futuro verso
eu seria a flor
tu serias a morte
e não te escreveria
neste desejo
incerto
de morrer-te
como murcha a flor
para ser semente

~

A palavra

*

A palavra quer deitar-se
sozinha, reflexa
contemplar devagar
o sol morre ao silêncio
Não há pressa, não há medo
A palavra quer morrer
quantas vezes for preciso

~

Se o meu pescador me pescasse

*

Se o meu pescador me pescasse
pelo arpão me agarrasse os versos
um a um, sem pressa
a melhor palavra do mar...
Mas em que lugar da asa
a palavra poderia ser mais bela?
Com que cheiro? Com que sabor?
Onde seria o lugar do sol
Com que cor? Com que brilho?
E sei que hei de escolher
depressa mas devagar
a palavra mais carnuda para comer
E vou comer intensamente
Com toda força dos meus (d)entes
na ponta dos dedos
as palavras que não me calo
E um peixe com asas
Há de nascer
E há de pescar-me no alto
o pescador
Espero

~

África Inexplorada

*

Eu sou a parte de toda África
Ainda inexplorada
Onde batuque
Se auto musica
No orvalho terrestre
Nas aguas ainda nudas
Que correm a mutação
Das savanas e das pestes
Eu sou África ainda pura
Que nos seus campos virgens
Ainda adora osol
E o canta pentatónica
Com a felicidade de existir
Sou África em cada pedaço de mim
E cada pedaço de mim a existir
Mupipi sobrevoando o grão
Urdindo o cântico liturgico
Da utopia nas sementes
Marrabentando o futuro
Com mesmo sol dendêm
Das acácias e das palancas
Das palmeiras alcançando o ceo
Eco ritmando o mistério e o feitiço
Da mãe ventrando a terra una
E da mão carne e alma de mulher
Eu sou a África profunda
Nos montes e ilhas
Que clamam os quatro ventos
Do sonho e dos horizontes
Que nos escorrem pelos dedos
No desacredito dos desertos
E das rochas esquecidas
Sou eu África fecunda
Que te escrevo
No sabor do lirismo que nos une
Na poesia dos povos
Neste exotismo de ânsias
Que nos sonha
Parte da África ainda inexplorada.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario