viernes, 2 de octubre de 2020

nicolás lópez-pérez / de "tiempo & tempestad"










Escombros

*

De los escombros rescatarás
fotos, correos y obsequios
Ahí, encontrarás
tu cáscara de nuez
tu mente palpitando
los sueños de tus sueños
tus miedos bailando
bajo un arcoíris de cenizas
y un puñado de recuerdos pulverizados
por el encono de un lenguaje
que no volverás a ver

Pues ahí, después de tus ojos, a la derecha
reproduciéndose sombría y monocromo
el primer abandono que sufriste
entre los cuatro y los ocho
repetido veinticinco años más tarde
Ahí, bajo los escombros está tu rostro
pareciéndose, pálido, al mío
hasta cicatrizar las úlceras

Algún día nuestra época será un hecho pacífico

~

Ruinas

*

Exigirle a cada cosa que sea lo que dice ser
Exigirle a cada ruina que se lea por lo que fue

Las ruinas y la dirección de su memoria
Una cárcel, un expreso directo al archivo
Información que va quedando, que se recupera

Los archivos se oponen al olvido
Suena el río de archivos y aplicaciones
porque piedras, los mundos perdidos trae

Cada ruina contiene un mínimo de olvido
Cada civilización en la cabeza de alguien
cierra un ciclo que comenzó o acabó con guerra

A causa de la experiencia y el testimonio
una cuncuna en verso deja un lastre en imagen
Las ruinas se dispersan como gas lacrimógeno

Si la definición no daña, las ruinas son todo aquello
contra lo que el amor luchó en el bucle de la bestialidad

~

Deutschunterricht

*

El orden de las palabras
altera el producto

El sistema de puntuación
muestra las constelaciones

Una palabra con mayúscula
asfalta el sujeto en la oración

Sobrevivimos a la clase de alemán
victoriosos, mutilándonos las orejas

En la traducción perdemos
el ritmo del avión en aterrizaje

Al final, el pensamiento espera
que el lenguaje se comporte como tal

~

Gedichtelesung

*

«Lenguas perfectas, lenguas imperfectas»
así se titula la lectura de esta tarde
en una pizarrita de tiza verde y rosa
afuera de la librería-café
de esta ciudad rojo fuego
entré y saludé a los que habían llegado
aún no es hora
me pongo a escribir un deseo para hoy
[quiero para los poemas que se oirán
una soledad efímera
por cuyos poros fluirán
algo así
como la leve perfección cotidiana
de las palabras
lenguas perfectas, lenguas imperfectas
lenguas y lenguas que permitan
vaciar la página, la página de mi vida
intentando el viaje de las pérdidas
por las mejillas, por los labios
intentando el viaje por el tímpano
como un sonido a su velocidad
ni rápido ni lento
intentando el viaje
por las estepas, las planicies
los campos magnéticos
de los que se convocan
alrededor de la ceremonia
el sacrificio ocurre donde
un silencio abre mil puertas
y se desintegra de golpe
al fondo de sus cenizas
se ve el mar
mi boca
saborea
es el mar]

~

[En el museo dolíamos precisión sónica[

*

Am Anfang weh tun. Bitte traducir para la lengua
oficial conversando en este palimpsesto, una
dosis fresca de tempera, dice: “en el principio
duele”. En el principio era el dolor, ¿dónde?
En el gran azar del filme, sus manos palpan
ruedan unos 57 de sesenta y ocho milímetros.
Voice-over: museo, invierno, puchos, blablas.
Flashes que tragan lugar en la mente, en el cutis.
Gente traficándose a pérdida. Cerca. No tanto.
Las conversaciones en derredor, el gran atractivo
de la exhibición permanente. Vidas imperfectas.
Entre catarsis. Tras espejos. La gente de las 7 pm.
Horario gratuito. La composición del público es
plural. O diversa. Secuestramos el audio. Schweigen, shhh.
Bocas con acento españolísimo. Vencen todo oído, oh.
En este museo todo refulge. La vida suspende el deseo
mientras pinta. No serás un escombro, por más que
los meses se pierdan con excursión, por más que
el impacto venga en otra velocidad. Vivirás. Cualquier cosa
que le pase al rock and roll, Lavapiés nos tendrá tatuados.
Gin tonic + hachís con el trazo Picasso, piloteando la noche.
Work in progress. Sin palabras. Maestría en memoria.
Reverbera un deseo. El regreso, el sueño es del después:
mails que parten con sehr geehrte / queridx. Y adivinar cuál
es el truco. La escritura es ausencia y laboratorio. A veces
pasa que hay imágenes creyéndose superiores a las otras.
Como la de tu rostro, riendo, viendo con dulzura. O la que
nos inmortaliza en pose de a 2. Donde lo toques el recuerdo
duele, dice Seferis. El tacto, trascendental, edita esa distancia
con la realidad, lívida de ficción y sehnsucht, pixelando
el horizonte: un instante donde fuimos felices
un instante contra los demás donde no hemos sido felices,
solo uno y boom, el tiempo muere como girasol y jacaranda,
y florece como la noche en las calles con tantísima incertidumbre
en pugna: carne con carne hasta acabar. Du bist Klang.
Eres el sonido, donde las sábanas avalanchan. En el principio
duele, nadie sabe cómo retorna el boomerang que no choca.
Se repliega, aerodinámico. Estado de ánimo, anatomía de la
melancolía. Recordar ya no es como antes, sino un cine mudo.

~

Los vuelos no abordados se archivan

*

El punto de fuga: un sueño que se interrumpe
en la vigésima repetición.
Y quien sueña, se queda debajo de la corriente
por vigésima vez.
El punto de fuga genera un desafío a la mente.
Volverla, por un momento, absoluta y suspendida
en el magma de un despertar recurrente
un tiempo, un espacio
el temblor de la mirada
o el acuífero de ese rostro colosal, derruido
entre un avión que despega
y un sueño que se va
dentro de un sueño.
Cosa de acertar en la decisión.
El presente es una forma para depurar
aquello que no regresará.
Y lo sabes. Se ha pulverizado la esperanza
de los que no tienen esperanza.
La asimetría de información es brutal.
Cada decisión de gallinita ciega
es un sistema predictivo
de publicidad
que describe
y no embellece el paisaje.
Por el contrario, se guarda como una polaroid
como un corte en el brazo
que sangra en progresiones
alejándose
explicando el efecto doppler.
No vas en el avión y qué alivio
es un sueño
ni siquiera hay avión ni otra cosa.
Despierta y empaca tus pensamientos
el punto de fuga revienta y no espera.
Es un instante: tu sueño es archivo.
El caleidoscopio de un cóctel de pastillas.
Archívese.

~

Me estoy aproximando a una reescritura, a una reescritura

*

que gestiona estas emociones aceleradas por la mente
algunas ideas de cosas, algunos nombres de cosas
cosas producidas a una distancia extemporánea
cosas tan recientes que la curvatura del ánimo está caliente
y las manda eyectadas de sus poltrones y tronos
pues las palabras alcanzan su punto de ebullición
a no sé cuántos grados Celsius, a no sé cuántos grados Fahrenheit
solo salen disparadas hasta tocar el cielo
el cielo que les da forma y reforma
será porque se ha puesto a hervir las palabras de otro lugar
de otro tiempo, de otros libros, de otras voces a presión
                                                             y en depresión
cinco minutos en la caldera y estas palabras colapsan
hasta sonar de un modo distinto
si antes se escuchaban caer en la hoguera
ahora se escuchan saliendo expulsadas en otro espacio
y se escuchan, después de cinco minutos
las palabras articuladas con poca gravedad
se encienden y queman, humean y se rostizan
hasta llegar convertidas en un libro a tu cara
el libro de otro que estoy leyendo, reescribiendo
y podría continuar y continuar
hablando de colecciones, álbumes, catálogos
de tristeza, los libros que nunca se van a parar frente a dios
para decirle lo mucho más que han escrito
espero estar equivocado, espero estar equivocado
y cuando pase, veremos torres de papel en nuestras ciudades
allí estarán esos libros, pequeños dioses desatormentándose
en los quirófanos de sus cabezas, poniendo anestesia
a los viejos sueños y dejándolos volar para siempre
para siempre en lo que insisten llamar lengua

~

Toda la porquería que viene con el ser humano disminuye

*

El amor se transforma
en una medicina que purga
después de su propio después

~

Yo tenía mi ego y el corazón herido

*

Mi amor por ti
era un corazón
que hacías
bombear con
cada relámpago
como salvándolo
de la muerte
Mi ego en cambio
era una estocada
inexplicable
autodestructiva

~

Un poema del mayor amor posible que es el amor que se le tiene a lo que aún no se sueña que es el amor que

*

Un poema del mayor amor posible que es el amor que se le tiene a lo que aún no se sueña que es el amor que separa del cuerpo Espacios hay por montón Nuestras partículas atómicas no reconocen fronteras Son los nómades de este lado del imperio La mudanza no se avisa Pasa a cada momento Nuestras partículas se desarman y arman a la velocidad de la luz El amor es el que se tiene a otro lugar A partir del movimiento El mayor amor posible quedarse a solas con el vacío Un momento Milimétrico Imposible de cuantificar Un momento tan ínfimo que imaginario Un poema del mayor amor posible que es el amor que se le tiene a una película que va rodando lo que se va a soñar a cada momento en lo cotidiano en una llamada telefónica a distancia desde otra época y que suspendida se contesta en otra época Un poema del mayor amor posible que es el amor que se desborda que es y no es al mismo tiempo Un amor que parte de la imaginación De una sensación De una mercancía De una asociación de nombres O peor aún de ideas Algo que queda Algo que puede resucitarse Para ser dicho y descrito Un algo que se anticipa en la mente Un poema del mayor amor posible que es el amor que se le tiene a lo que nunca empieza a lo que nunca termina A lo que es más allá de toda velocidad más allá de toda representación imaginaria Un poema del mayor amor posible que es una película rodándose en el reverso de esta escritura El amor es una estrella de cine Las imágenes y marquesinas con los nombres propios nos han poblado la angustia que lucha contra muchedumbres ejércitos flotas naves espaciales de tetrahidrocannabinol de benzodiazepinas Una lucha que mantiene suspendido al amor Amarrado Entre los recuerdos archivados en una página web O en las carpetas del computador que no se abre El amor a un clic de distancia Toda la información de quién fuiste y de con quién fuiste Un poema del mayor amor posible que es un amor que habla en estos tiempos y dice que la inexistencia es mayor trabajo Un absurdo Una película basada en una historia real Pasa una u otra cosa de película De guion De montaje que avanza y envejece a medida que da media vuelta para mirar lo imaginario que es el aprendizaje entre una persona y otra entre una cosa y otra Nos apropiamos de lo que queremos llorar De lo que queremos conectar De lo que queremos articular como pregunta Y pregunta –como en un cuento de cuyo autor estadounidense no quiero acordarme- de qué hablamos cuando hablamos de amor Pues te lo diré Un scherzo que suena en un vinilo de color púrpura mientras te miro en mis recuerdos caminando por un campo de begonias y tulipanes multicolores y de tamaños descomunales hacia un allegro que no es ningún lugar más que el disco duro Nuestro cielo Ahí es donde se filma nuestro concierto En un poema del mayor amor posible Una imagen que no es borrada todavía Contra todo pronóstico Sigue legible Sigue resonante Y ahí Cada vez más desteñida y pacífica

***
Nicolás López-Pérez (Rancagua, 1990) "Tiempo & tempestad" en: De la naturaleza afectiva de la forma. Rancagua, Chile / Buenos Aires, Argentina: Astronómica / Metaliteratura, 2020. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario