jueves, 31 de agosto de 2017

rene char / remanencia













¿Qué te hace sufrir? Como si se despertara en la casa sin ruido
el ascendiente de un rostro al que parecía haber fijado un agrio espejo. Como si, bajadas la alta lámpara y su resplandor
encima de un plato ciego, levantaras hacia tu garganta oprimida la mesa antigua con sus frutos. Como si revivieras tus fugas
entre la bruma matinal al encuentro de la rebelión tan querida, que supo socorrerte y alzarte mejor que cualquier ternura.
Como si condenases, mientras tu amor está dormido, el pórtico soberano y el camino que lleva a él.
¿Qué te hace sufrir?
Lo irreal intacto en lo real devastado. Sus rodeos aventurados cercados de llamadas y de sangre.
Lo que fue elegido y no fue tocado, la orilla del salto hasta la ribera alcanzada, el presente irreflexivo que desaparece.
Una estrella que se ha acercado, la muy loca, y va a morir antes que yo.

***
René Char (L'Isle-sur-Sorgue, 1907-París, 1988)
Versión de Jorge Riechmann

/

Rémanence

De quoi souffres-tu ?
Comme si s'éveillait dans la maison sans bruit l'ascendant d'un visage qu'un aigre miroir semblait avoir figé.Comme si la haute lampe et son éclat abaissé sur une assiette aveugle, tu soulevais vers ta gorge serrée la table ancienne avec ses fruits.
Comme si tu revivais tes fugues dans la vapeur du matin à la rencontre de la révolte tant chérie, elle qui su, mieux que toute tendresse, te secourir et t'élever.
Comme si tu condamnais, tandis que ton amour dort, le portail souverain et le chemin qui y conduit.
De quoi souffres-tu ?
De l'irréel intact dans le réel dévasté ?
De leurs détours aventurés, cerclés d'appel et de sang ?
De ce qui fut choisi et ne fut pas touché ?
De la rive du bon au rivage gagné ?
Du présent irréfléchi qui disparaît ?

D'une étoile qui s'est la folle, rapprochée et qui va mourir avant moi?

miércoles, 30 de agosto de 2017

homero arce / árbol



Éste árbol grande que nació pequeño
echó raíces en la tierra dura,
y desde el fondo de su oscuro sueño
sacó el oro terrestre hacia la altura.
Sacó la claridad con dulce empeño
de la tierra y del agua la frescura
del aire ahora rumoroso dueño
a los vientos despliega su estructura.
Alamo del camino, mástil de oro,
navío de las olas forestales,
alta columna de esplendor sonoro,
dame una rama de tu fuerza alada,
un gramo de tus íntimos metales,
y nacerá la luz en mí enterrada.

***
Homero Arce (Iquique, 1900-Santiago de Chile, 1977) El árbol y otras hojas. Santiago de Chile:  Zig-Zag, 1967.

/

Fotografía: el poeta junto a Pablo Neruda y Matilde Urrutia en Isla Negra

martes, 29 de agosto de 2017

giuseppe ungaretti / la piedad











1

Soy un hombre herido.
Y yo quisiera irme
y llegar finalmente,
piedad, a donde se escucha
al hombre que está sólo consigo.

No tengo más que soberbia y bondad.

Y me siento exilado en medio de los hombres.

Mas por ellos estoy en pena.

¿No sería digno de volver a mí?

He poblado de nombres el silencio.

¿He hecho pedazos corazón y mente
para caer en servidumbre de palabras?
Reino sobre fantasmas.

Hojas secas,
alma llevada aquí y allá...,

No, odio el viento y su voz
de bestia inmemorable.

Dios, ¿aquéllos que te imploran
no te conocen más que de nombre?

Me has arrojado de la vida:
¿me arrojarás de la muerte?

Quizá el hombre también es indigno de esperanza.

¿Hasta la fuente del remordimiento está seca?

El pecado, qué importa
si ya no conduce a la pureza.

La carne apenas recuerda
que tuvo fuerza una vez.

Loca y gastada está el alma.

Dios mira nuestra debilidad.

Queremos una certeza.

¿Ya ni siquiera te ríes de nosotros?

Compadécenos entonces, crueldad.

No puedo seguir amurallado
en el deseo sin amor .

Muéstranos una huella de justicia.

Tu ley, ¿cuál es?

Fulmina mis pobres emociones,
libérame de la inquietud.
Estoy cansado de gritar sin voz.

2

Carne melancólica
donde una vez pululó la alegría,
ojos entreabiertos del despertar cansado,
¿ves tú, alma demasiado madura,
lo que seré caído en la tierra?

Está en los vivos el camino de los difuntos,

nosotros somos una riada de sombras,

y ellas el grano que explota en el sueño,

de ellas es la lejanía que nos queda
y de ellas la sombra que da peso a los nombres.

La esperanza de una gran sombra
¿sólo es esto nuestra suerte?

¿Y no serías tú más que un sueño, Dios?

Temerarios, por lo menos un sueño
queremos que sea semejante a ti.

Es parto de la locura más clara.

No tiembla en nubes de ramas
como pájaros de la madrugada
al borde de los párpados.

En nosotros está y languidece, llaga misteriosa

3

La luz que nos aguija
es un hilo cada vez más sutil.
¿Sólo deslumbras matando?
Dáme esta alegría suprema.

4

El hombre, monótono universo,
cree acrecentar sus bienes,
y de sus manos febriles
no salen, sin fin, más que límites.

Pegado al vacío,
a su hilo de araña,

no teme ni seduce
más que a su propio grito.

Evita el desgaste haciendo tumbas,
y para pensarte, Eterno,
no tiene más que blasfemias.

***
Giuseppe Ungaretti (Alejandría, 1888-Milán, 1970)
Versión de Jesús López Pacheco

/

La pietà

1

Sono un uomo ferito.

E me ne vorrei andare
E finalmente giungere,
Pietà, dove si ascolta
L’uomo che è solo con sé.

Non ho che superbia e bontà.

E mi sento esiliato in mezzo agli uomini.

Ma per essi sto in pena.
Non sarei degno di tornare in me?

Ho popolato di nomi il silenzio.

Ho fatto a pezzi cuore e mente
Per cadere in servitù di parole?

Regno sopra fantasmi.

O foglie secche,
anima portata qua e là…

No, odio il vento e la sua voce
Di bestia immemorabile.

Dio, coloro che t’implorano
Non ti conoscono più che di nome?

M’hai discacciato dalla vita.

Mi discaccerai dalla morte?

Forse l’uomo è anche indegno di sperare.

Anche la fonte del rimorso è secca?

Il peccato che importa,
se alla purezza non conduce più.

La carne si ricorda appena
Che una volta fu forte.

È folle e usata, l’anima.

Dio guarda la nostra debolezza.

Vorremmo una certezza.

Di noi nemmeno più ridi?

E compiangici dunque, crudeltà.

Non ne posso più di stare murato
Nel desiderio senza amore.

Una traccia mostraci di giustizia.

La tua legge qual è?

Fulmina le mie povere emozioni,
liberami dall’inquietudine.

Sono stanco di urlare senza voce.

2

Malinconiosa carne
dove una volta pullulò la gioia,
occhi socchiusi del risveglio stanco,
tu vedi, anima troppo matura,
quel che sarò, caduto nella terra?

È nei vivi la strada dei defunti,

siamo noi la fiumana d’ombre,

sono esse il grano che ci scoppia in sogno,

loro è la lontananza che ci resta,

e loro è l’ombra che dà peso ai nomi,

la speranza d’un mucchio d’ombra
e null’altro è la nostra sorte?

E tu non saresti che un sogno, Dio?

Almeno un sogno, temerari,
vogliamo ti somigli.

È parto della demenza più chiara.

Non trema in nuvole di rami
Come passeri di mattina
Al filo delle palpebre.

In noi sta e langue, piaga misteriosa.

3

La luce che ci punge
È un filo sempre più sottile.

Più non abbagli tu, se non uccidi?

Dammi questa gioia suprema.

4

L’uomo, monotono universo,
crede allargarsi i beni
e dalle sue mani febbrili
non escono senza fine che limiti.

Attaccato sul vuoto
Al suo filo di ragno,
non teme e non seduce
se non il proprio grido.

Ripara il logorio alzando tombe,
e per pensarti, Eterno,
non ha che le bestemmie.

lunes, 28 de agosto de 2017

violeta parra / porque los pobres no tienen








Porque los pobres no tienen
adonde volver la vista,
la vuelven hacia los cielos
con la esperanza infinita
de encontrar lo que su hermano
en este mundo le quita.

¡palomita!
¡qué cosas tiene la vida,
ay zambita!

Porque los pobres no tienen
adonde volver la voz,
la vuelven hacia los cielos
buscando una confesión
ya que su hermano no escucha
la voz de su corazón.

Porque los pobres no tienen
en este mundo esperanzas,
se amparan en la otra vida
como a una justa balanza,
por eso las procesiones,
las velas, las alabanzas.

De tiempos inmemoriales
que se ha inventado el infierno
para asustar a los pobres
con sus castigos eternos,
y el pobre, que es inocente,
con su inocencia creyendo.

El cielo tiene las riendas,
la tierra y el capital,
y a los soldados del Papa
les llena bien el morral,
y al que trabaja le meten
la gloria como un bozal.

Para seguir la mentira,
lo llama su confesor,
le dice que Dios no quiere
ninguna revolución,
ni pliegos ni sindicatos,
que ofende su corazón.

***
Violeta Parra (San Fabián de Alinco, 1917-Santiago de Chile, 1967) Poesía. Valparaíso: Ediciones Universidad de Valparaíso, 2016.

domingo, 27 de agosto de 2017

william carlos williams / la carretilla roja













mucho depende
de una

carretilla
roja

vidriosa por agua
lluvia

junto a las gallinas
blancas

***
William Carlos Williams (Rutherford, 1883-1963)
Versión de Nicolás López-Pérez

/

The Red Wheelbarrow

so much depends
upon

a red wheel
barrow

glazed with rain
water

beside the white
chickens.

N. del E. El blog de poesía "Otra iglesia es imposible" recientemente compiló ocho versiones en castellano del poema en comento. Pueden revisarlas acá.

sábado, 26 de agosto de 2017

efraín barquero / la compañera













Así es mi compañera.
La he tomado de entre los rostros pobres
con su pureza de madera sin pintar,
y sin preguntar por sus padres
porque es joven, y la juventud es eterna,
sin averiguar donde vive
porque es sana, y la salud es infinita como el agua,
y sin saber cuál es su nombre
porque es bella, y la belleza no ha sido bautizada.

Es como las demás muchachas
que se miran con apuro en el espejo trizado de la aurora
antes de ir a sus faenas. Así es,
y yo no sé si más bella o más fea que las otras,
si el vestido de fiesta le queda mal,
o la ternura equivoca a menudo sus palabras,
yo no sé,
pero sé que es laboriosa.
Como los árboles, teje ella misma sus vestidos,
y se los pone la naturalidad del azahar
como si los hiciera de su propia sustancia,
sin preguntarle a nadie, como si la tierra,
sin probárselos antes, como el sol,
sin demorarse mucho, como el agua.

Es una niña del pueblo,
y se parece a su calle en un día de trabajo
con sus caderas grandes como las artesas o las cunas,
así es, y es más dulce todavía,
como agregar más pan a su estatura,
más carbón a sus ojos ardientes,
más uva a su ruidosa alegría.

***
Efraín Barquero (Piedra Blanca, 1931)

viernes, 25 de agosto de 2017

bruno vidal / la solución es militar











La poesía indecorosa, falta de rigor, falta de fe, falta de propósitos benignos,
Falta de recursos, falta de ortografía, falta de inspiración, narcisista, arrogante, esbelta,
Amante de sí misma, ególatra, segura de sí misma, tajante, centro de mesa,
Pagada de sí misma, falta de autoridad moral en las Bellas Letras.

La poesía arribista codeándose con las altas esferas, con los de alto copete,
Con los primeros figurones del municipal, con los chacales de las prefecturas,
Con los villanos de los altos mandos, charla amena con los puercos de las magistraturas, Trato íntimo con los advenedizos de la pasarela cultural progresista,
Congratulaciones de los esbirros en el altar de la patria.

La poesía embustera, falta de energía, falta de cojones, falta de honorabilidad,
Falta de heroísmo personal, falta de comunicación con el arte de la extrema pobreza.

La poesía, panfleto, consigna, lema, spot publicitario, dentro de foco, farandulera
Integrándose al sistema, al blog de la cháchara neoliberal, a la farsa gobernante,
A la tarjeta dorada de American Express.

La poesía, falta de delicadeza, falta de espíritu, falta de tacto, falta de colorido,
Falta de respeto, falta de entendimiento con las sinagogas,
Falta de apostolado con las basílicas, falta de pudor,
Falta de pericia al identificar los restos del patio 29,
Falta de tino con los humildes que no encuentran salida en el hogar de Cristo.

La poesía no es observante, no es purísima, no es calvario,
No es patíbulo en Semana Santa, no es sacramento, no es cáliz de sangre,
No es virgen María que interceda en la gruta de Lourdes.


Falta de agallas en la guerra de guerrillas, falta de entusiasmo en la toma de partido,
Falta de puntería en la acción directa, falta de vigilia en la línea de avanzada.

La poesía tiene la desfachatez de hacer sus descargos en la declamación pública del poeta:
........... . ...... .. .. . . . . .. . . Los trapos sucios se lavan en casa.

Y este creyente con muchísimas dificultades en este ejercicio espiritual
De querer llamar la atención del publico cautivo y cautivante
Se insensibiliza en la hechura escrupulosa de un verso que ya se quisiera libre,
Por lo demás.

Poesía dése el tiempo de visitar las catacumbas de los primeros cristianos
Por otra parte usted puede darse el trabajo de corregir las malas costumbres
Adquiridas por un proletariado en falta de mérito, en falta de conciencia
Y en falta de organización.

Usted poesía puede esquivar los caprichos de los pequeños burgueses
Persistentemente envalentonados en los aleros de las clases dominantes.

Usted poesía puede prestar socorro a los miembros activos de la Santísima Trinidad
Usted poesía puede celebrar misa diaria en la nave central de una catedral.

Usted poesía puede izar la bandera de lucha en la Plaza de la Ciudadanía.

Usted puede comportarse a la altura de las circunstancias
Declame a viva voz: la solución es militar.

Poeta lo que usted me demanda en la petición de principio
Es francamente ilusorio, quimérico, bufonesco e idealista
No estoy en condiciones de redimir a los hombres de mala voluntad.

No presto amparo a los afligidos en la sesión de tortura
Ni abogo por la situación delicada de Carlos Contreras Maluje
No me preocupa en lo más mínimo la suerte de los que cayeron en desgracia
No conozco la parábola del buen samaritano ni he leído la primera encíclica
De nuestro amado Cardenal Ratzinger.

No tengo noción de que yo haya sido voz cantante o protagonista principal
En la vicaría de la solidaridad
No comulgo con los mártires del Partido Comunista.

No escribí una octavilla a favor de los trabajadores de la ciudad y el campo
Jamás afirmé que yo fuese un arma cargada de futuro
A lo más un expediente seguro de los que siempre se refugiarán cobardemente
En el refrán ambiguo de La Palabra.

***
Bruno Vidal (Santiago de Chile, 1957)

jueves, 24 de agosto de 2017

verónica zondek / de el hueso de la memoria













OLVIDO TU PRESENCIA
en mi hueso yacente
mi hueso
como si fuera llorona estela de tu porte
en este vaivén
erigido
siempre
en este cuerpo
entero
impotente tú
ante mi que te acuso
ante él
que pudiendo
no es nadie
Y SE PROLONGA.

~~~

Soy derrumbe en la mina ventrilocua
y escapa la luz
MI DESOLADA.

Penetro el juego.
La yalabra es licita.

TIEMBLO.

~~~

Desciendo a los parques
al metro
a los anuncios
y creyentes
en el ayer de ahora
predescibles son los minutos.
Entera
ROMPO
y no me freno.

~~~

El ojo está claro bajo la garra
La asfixia está en la coraza
El artefacto está prendido.

Tú y yo en la diferencia. .

Casi
casi juntos
casi.

~~~

La risa
es sólo recuerdo de quién soy.

~~~

Arlequin de palabra.
Aparece tu carne en otro
Otro enceguece la libertad con fuego
mientras tu discurso
viste la necesidad
de frente
al que te reemplaza.

***
Verónica Zondek (Santiago de Chile, 1953) El hueso de la memoria. Buenos Aires: Ediciones Último Reino, 1988.

miércoles, 23 de agosto de 2017

wole soyinka / ujamaa













(para Julius Nyerere)

El sudor es levadura para la tierra
no su tributo. La tierra henchida
no desea homenaje por sus labores.
El sudor es levadura para la tierra
no un homenaje para un dios en su fortaleza.
Tu manos de tierra negra desencadenan
la esperanza de mensajeros de la muerte, de
caninomanoides endogámicos que resultan
más macabros que La Parca, insaciables
predadores de la humanidad, su carne.
El sudor es levadura, pan, Ujamaa
pan de la tierra, por la tierra
para la tierra. La tierra es la gente.

***
Wole Soyinka (Abeokuta, 1934) Lanzadera en una cripta. Madrid: Bartleby Editores, 2010.
Versión de Luis Ingelmo

martes, 22 de agosto de 2017

angela figuera aymerich / belleza cruel










Dadme un espeso corazón de barro,
dadme unos ojos de diamante enjuto,
boca de amianto, congeladas venas,
duras espaldas que acaricie el aire.
Quiero dormir a gusto cada noche.
Quiero cantar a estilo de jilguero.
Quiero vivir y amar sin que me pese
ese saber y oír y darme cuenta;
este mirar a diario de hito en hito
todo el revés atroz de la medalla.
Quiero reír al sol sin que me asombre
que este existir de balde, sobreviva,
con tanta muerte suelta por las calles.

Quiero cruzar alegre entre la gente
sin que me cause miedo la mirada
de los que labran tierra golpe a golpe,
de los que roen tiempo palmo a palmo,
de los que llenan pozos gota a gota.

Porque es lo cierto que me da vergüenza,
que se me para el pulso y la sonrisa
cuando contemplo el rostro y el vestido
de tantos hombres con el mido al hombro,
de tantos hombres con el hambre a cuestas,
de tantas frentes con la piel quemada
por la escondida rabia de la sangre.

Porque es lo cierto que me asusta verme
las manos limpias persiguiendo a tontas
mis mariposas de papel o versos.
Porque es lo cierto que empecé cantando
para poner a salvo mis juguetes,
pero ahora estoy aquí mordiendo el polvo,
y me confieso y pido a los que pasan
que me perdonen pronto tantas cosas.

Que me perdonen esta miel tan dulce
sobre los labios, y el silencio noble
de mis almohadas, y mi Dios tan fácil
y este llorar con arte y preceptiva
penas de quita y pon prefabricadas.

Que me perdonen todos este lujo,
este tremendo lujo de ir hallando
tanta belleza en tierra, mar y cielo,
tanta belleza devorada a solas,
tanta belleza cruel, tanta belleza.

***
Ángela Figuera Aymerich (Bilbao, 1902-Madrid, 1984)

alejandra pizarnik / salvación













Se fuga la isla
Y la muchacha vuelve a escalar el viento
y a descubrir la muerte del pájaro profeta
Ahora
es el fuego sometido
Ahora
es la carne
    la hoja
    la piedra
perdidos en la fuente del tormento
como el navegante en el horror de la civilación
que purifica la caída de la noche
Ahora
la muchacha halla la máscara del infinito
y rompe el muro de la poesía.

***
Alejandra Pizarnik (Avellaneda, 1936-Buenos Aires, 1972) Obras completas. Buenos Aires: Clauter, s/a.

lunes, 21 de agosto de 2017

andrés bello / el anauco













Irrite la codicia
por rumbos ignorados
a la sonante Tetis
y bramadores austros;
el pino que habitaba
del Betis fortunado
las márgenes amenas
vestidas de amaranto,
impunemente admire
los deliciosos campos
del Ganges caudaloso,
de aromas coronado.

Tú, verde y apacible
ribera del Anauco,
para mí más alegre,
que los bosques idalios
y las vegas hermosas
de la plácida Pafos,
resonarás continuo
con mis humildes cantos;
y cuando ya mi sombra
sobre el funesto barco
visite del Erebo
los valles solitarios,
en tus umbrías selvas
y retirados antros
erraré cual un día,
tal vez abandonando
la silenciosa margen
de los estigios lagos.

La turba dolorida
de los pueblos cercanos
evocará mis manes
con lastimero llanto;
y ante la triste tumba,
de funerales ramos
vestida, y olorosa
con perfumes indianos,
dirá llorando Filis:
«Aquí descansa Fabio» .

¡Mil veces venturoso!
Pero, tú, desdichado,
por bárbaras naciones
lejos del clima patrio
débilmente vaciles
al peso de los años.
Devoren tu cadáver
los canes sanguinarios
que apacienta Caribdis
en sus rudos peñascos;
ni aplaque tus cenizas
con ayes lastimados
la pérfida consorte
ceñida de otros brazos.

***
Andrés Bello (Caracas, 1781-Santiago de Chile, 1865) Antología de Andrés Bello. Caracas: Kapelusz, 1964.

Pintura por Raymond Monvoisin

domingo, 20 de agosto de 2017

gonzalo millán / la ciudad, 13



Llueve.
La lluvia mancha las calles.
El asfalto mojado es lustroso.
Los peatones se cubren.
El sombrero cubre la cabeza.
El paraguas resguarda de la lluvia.
Los zapatos entran en las galochas.
Las galochas son de goma.
La pelota es de goma.
La pelota rebota en el suelo.
La lluvia rebota en el suelo.
Llueve a cántaros.
Los cántaros son de barro.
La lluvia forma charcos.
En los charcos se forma barro.
La lluvia forma burbujas al caer en los charcos.
Los autos salpican.
El agua rebota en el techo.
Los techos se llueven.
Las goteras caen en tarros.
Las aguas corren por los tejados.
Los canalones recogen las aguas.
Los techos chorrean.
La lluvia golpea las ventanas.
Las gotas resbalan por los vidrios.
La lluvia moja.
La lluvia humedece las paredes.
La tierra se empapa.
Llueve en la ciudad.
Llueve en el poema.
El anciano escribe.
Las gotas de lluvia no son centavos.
Ojalá fueran centavos las gotas de lluvia.

***
Gonzalo Millán (Santiago de Chile, 1947-2006) La ciudad. Santiago de Chile: Cuarto Propio, 1994.

Fotografía: memoriachilena.cl

sábado, 19 de agosto de 2017

josé ángel cuevas / los alcohólicos de chile













A los alcohólicos de Chile / Quién los mató?
Quién los vengará?

sus corazones mitad agua
mitad sol / sus corazones

Los alcohólicos de chile lloran
llevan su pedazo de locura pegada al pellejo
vencidos parcialmente por la vida
por la muerte

como los araucanos
no fueron capaces de seguir disparando
tiraron la toalla
(pero no esos alcohólicos frívolos
pintiparados
platudos)

Los que aquí cayeron
la otra sangre derramada
sentados a orillas del camino de la vida y
sin saber nada
movieron los ojos a las nieves eternas

Honor y Gloria a los alcohólicos de chile

Quién los mató?
Quién los vengará?

***
José Ángel Cuevas (Santiago de Chile, 1944) Canciones Oficiales. Santiago de Chile: Ediciones UDP, 2008.

viernes, 18 de agosto de 2017

antonin artaud / el yunque de las fuerzas













Ese flujo, esa náusea, esas tiras: aquí comienza el fuego. El fuego de lenguas. El fuego tejido en flecos de lenguas, en el reflejo de la tierra que se abre como un vientre que está por parir, con entrañas de miel y azúcar. Con todo su obsceno tajo ese vientre fláccido bosteza, pero el fuego bosteza por encima con lenguas retorcidas y ardientes que llevan en la punta rendijas parecidas a la sed. Ese fuego retorcido como nubes en el agua límpida, con la luz al lado que traza una recta y algunas pestañas. Y la tierra entreabierta por todas partes muestra áridos secretos. Secretos como superficies. La tierra y sus nervios, y sus prehistóricas soledades, la tierra de geologías primitivas, donde se descubren secciones del mundo en una sombra
negra como el carbón. La tierra es madre bajo el hielo del fuego. Ved el fuego en los Tres Rayos, coronado por su melena en la que pululan ojos. Miríadas de miriápodos de ojos. El centro ardiente y convulso de ese fuego es como la punta descuartizada del trueno en la cima del firmamento. Centro blanco de las convulsiones. Un resplandor absoluto en el tumulto de la fuerza. La espantosa punta de la fuerza que se quiebra con estruendo azul.
Los Tres Rayos forman un abanico cuyas ramas caen rectas y convergen hacia el mismo centro. Ese centro es un disco lechoso recubierto por una espiral de eclipses.
La sombra del eclipse forma un muro sobre los zig-zags de la alta albañilería celeste.
Pero por encima del cielo está el Doble-Caballo. La evocación del Caballo se empapa en la luz de la fuerza sobre un fondo de muro deteriorado y exprimido hasta la trama. La trama de su doble pecho. El primero de los dos es mucho más extraño que el otro. Él recoge el resplandor del cual el segundo es sólo la pesada sombra.
Más bajo aún que la sombra del muro, la cabeza y el pecho del caballo proyectan una sombra como si toda el agua del mundo hiciera subir el orificio de un pozo.
El abanico desplegado domina una pirámide de cimas, un inmenso concierto de vértices. Una idea de desierto planea sobre esos vértices por encima de los cuales flota un astro desmelenado, horriblemente, inexplicablemente suspendido. Suspendido como el bien en el hombre o el mal en el comercio de hombre
a hombre, o la muerte en la vida. Fuerza giratoria de los astros.
Pero detrás de esa visión de absoluto, ese sistema de plantas, de estrellas, de terrenos partidos hasta los huesos, detrás de esa ardiente floculación de gérmenes, esa geometría de búsquedas, ese sistema giratorio de vértices, detrás de ese arado hundido en el espíritu y ese espíritu que separa sus fibras, y descubre sus sedimentos, detrás de esa mano de hombre, en fin, que deja impreso su duro pulgar y dibuja sus tanteos, detrás de esa mescolanza de manipulaciones y cerebro y esos pozos en todas las direcciones del alma y esas cavernas en la realidad, se alza la Ciudad amurallada, la Ciudad inmensamente alta a la que no basta todo el cielo para hacerle un techo donde las plantas crecen en sentido inverso y con una velocidad   de astros despedidos.
Esa ciudad de cavernas y de muros que proyecta sobre el abismo absoluto arcos perfectos y subsuelos como puentes.
Cómo se quisiera en la concavidad de esos arcos, en la arcada de esos puentes insertar la curva de un hombro desmesuradamente grande, de un hombro en el cual se difunde la sangre. Y colocar su cuerpo en reposo y su cabeza en la que hormiguean los sueños sobre el reborde de esas cornisas gigantescas donde se escalona el firmamento.
Pues un cielo de Biblia está  allá arriba por donde se deslizan blancas nubes. Pero las suaves amenazas de esas nubes. Pero las tormentas. Y ese Sinaí del que dejan asomar las pavesas. Pero la sombra que hace la tierra y la iluminación apagada  y blancuzca. Pero finalmente esa sombra en forma de cabra y ese macho cabrío. Y el aquelarre de las Constelaciones.
Un grito para recoger todo eso y una lengua para ahorcarme.

Todos esos reflujos comienzan en mí.
Mostradme la inserción de la tierra, la bisagra de mi espíritu, el atroz nacimiento de mis uñas. Un bloque, un inmenso bloque artificial me separa de mi mentira. Y ese bloque tiene el color que cada uno quiere.
El mundo deja allí su baba como el mar sobre las rocas y como yo con los reflujos del amor. 
Perros, habéis terminado de hacer rodar vuestros guijarros sobre mi alma. Yo. Yo. Dad vuelta la página de los escombros. También yo espero el pedregullo celeste y la playa sin márgenes. Es necesario que ese fuego comience en mí. Ese fuego y esas lenguas y las cavernas de mi gestación. Que los bloques de hielo retornen a encallar bajo mis dientes. Tengo el cráneo espeso, pero el alma lisa, un corazón de materia encallada. Carezco de meteoros, carezco de fuelles ardientes. Busco en mi garganta nombres, y algo como la pestaña vibrátil de las cosas. El olor de la nada, un tufo de absurdo, el estiércol de la muerte total. El humor ligero y rarefacto. También yo no espero sino al viento. Que se llame amor o miseria casi no logrará hacerme encallar sino en una playa de osamentas.

***
Antonin Artaud (Marsella, 1896-París, 1948)
Versión de Aldo Pellegrini

jueves, 17 de agosto de 2017

bob dylan / una fuerte lluvia va a caer









¿Dónde has estado mi hijo de los ojos azules?
¿Dónde has estado mi pequeño querido?
He tropezado en el costado de doce montañas nubladas
He caminado y gateado en seis autopistas inclinadas
Me he parado en el medio de siete forestas tristes
He estado afuera de frente a una docena de océanos muertos,
He estado diez mil millas en la boca de una tumba
Y es una fuerte, fuerte, fuerte, fuerte
Y es una fuerte lluvia la que va a caer.

¿Qué has visto mi hijo de los ojos azules?
¿Qué has visto mi pequeño querido?
Vi un niño recién nacido con lobos salvajes a su alrededor;
Vi una carretera de oro sin nadie en ella
Vi una rama negra con sangre que seguía cayendo
Vi un cuarto lleno de hombres con martillos ensangrentados
Vi una blanca escala toda cubierta de agua
Vi diez mil conversadores con las lenguas todas rotas
Vi revólveres y espadas filosas en las manos de pequeñuelos
Y es una fuerte, fuerte, fuerte, fuerte
Y es una fuerte lluvia la que va a caer.

¿Qué escuchaste mi hijo de los ojos azules?
¿Qué escuchaste mi pequeño querido?
Escuché el sonido del relámpago que bramaba advertencias
Escuché el rugido de una ola capaz de inundar al mundo entero
Escuché a cien tam-tams cuyas manos estaban incendiadas
Escuché a diez mil murmurando y nadie escuchaba
Escuché a una persona morir de hambre y a muchos reírse
Escuché la canción de un poeta que murió en el arroyo
Escuché los sonidos de un payaso que lloraba en el callejón
Escuché el sonido de una persona que clamaba ser humano
Y es una fuerte, fuerte, fuerte, fuerte
Y es una fuerte lluvia la que va a caer.

¿A quién encontraste mi hijo de los ojos azules?
¿A quién encontraste mi pequeño querido?
Encontré a un chico al lado de un pony muerto
Encontré a un blanco arrastrando a un perro negro
Encontré a una joven cuyo cuerpo se quemaba
Encontré a un joven que me dio un arco iris
Encontré a un joven que estaba herido de amor
Encontré otro hombre herido de odio
Y es una fuerte, fuerte, fuerte, fuerte
Y es una fuerte lluvia la que va a caer.

¿Qué harás ahora mi hijo de los ojos azules?
¿Qué harás ahora mi pequeño querido?
Me voy afuera antes que la lluvia comience a caer
Caminaré hacía las profundidades de la foresta oscura más profunda
Donde la gente es numerosa y sus manos están vacías
Donde las píldoras de veneno están inundando sus aguas
Donde la casa del valle encuentra la prisión húmeda y sucia
Donde el rostro del verdugo está siempre bien escondido
Donde el hambre es feo, donde las almas son olvidadas
Donde el color es negro, donde nada es el número
Y yo diré y lo hablaré y lo pensaré y lo respiraré
Y lo reflejaré desde la montaña para que todas las almas lo puedan ver
Entonces me pararé sobre el océano hasta empezar a hundirme
Pero sabré bien mi canción antes de empezar a cantar
Y es una fuerte, fuerte, fuerte, fuerte
Y es una fuerte lluvia la que va a caer.

***
Bob Dylan (Duluth, 1941)
Versión aquí.

/

A Hard Rain's A Gonna Fall

Oh, where have you been, my blue-eyed son?
Oh, where have you been, my darling young one?
I've stumbled on the side of twelve misty mountains,
I've walked and I've crawled on six crooked highways,
I've stepped in the middle of seven sad forests,
I've been out in front of a dozen dead oceans,
I've been ten thousand miles in the mouth of a graveyard,
And it's a hard, and it's a hard, it's a hard, and it's a hard,
And it's a hard rain's gonna fall.

Oh, what did you see, my blue-eyed son?
Oh, what did you see, my darling young one?
I saw a newborn baby with wild wolves all around it
I saw a highway of diamonds with nobody on it,
I saw a black branch with blood that kept drippin',
I saw a room full of men with their hammers a-bleedin',
I saw a white ladder all covered with water,
I saw ten thousand talkers whose tongues were all broken,
I saw guns and sharp swords in the hands of young children,
And it's a hard, and it's a hard, it's a hard, it's a hard,
And it's a hard rain's gonna fall.

And what did you hear, my blue-eyed son?
And what did you hear, my darling young one?
I heard the sound of a thunder, it roared out a warnin',
Heard the roar of a wave that could drown the whole world,
Heard one hundred drummers whose hands were a-blazin',
Heard ten thousand whisperin' and nobody listenin',
Heard one person starve, I heard many people laughin',
Heard the song of a poet who died in the gutter,
Heard the sound of a clown who cried in the alley,
And it's a hard, and it's a hard, it's a hard, it's a hard,
And it's a hard rain's gonna fall.

Oh, who did you meet, my blue-eyed son?
Who did you meet, my darling young one?
I met a young child beside a dead pony,
I met a white man who walked a black dog,
I met a young woman whose body was burning,
I met a young girl, she gave me a rainbow,
I met one man who was wounded in love,
I met another man who was wounded with hatred,
And it's a hard, it's a hard, it's a hard, it's a hard,
It's a hard rain's gonna fall.

Oh, what'll you do now, my blue-eyed son?
Oh, what'll you do now, my darling young one?
I'm a-goin' back out 'fore the rain starts a-fallin',
I'll walk to the depths of the deepest black forest,
Where the people are many and their hands are all empty,
Where the pellets of poison are flooding their waters,
Where the home in the valley meets the damp dirty prison,
Where the executioner's face is always well hidden,
Where hunger is ugly, where souls are forgotten,
Where black is the color, where none is the number,
And I'll tell it and think it and speak it and breathe it,
And reflect it from the mountain so all souls can see it,
Then I'll stand on the ocean until I start sinkin',
But I'll know my song well before I start singin',
And it's a hard, it's a hard, it's a hard, it's a hard,
It's a hard rain's gonna fall.

miércoles, 16 de agosto de 2017

eduardo leiva herrera / tres poemas













Mirador de oficio
---

Hojas que caen
mirando las hojas
caer.

/

Odisea
---

Palo de helado
cruza navegando
el charco del cielo

/

Hay un lugar en nosotros
---

No existe lo mío porque yo no existo
es decir no existe la importancia de que diga de mí
que existo
o cualquier cosa.

No hay tal soy porque todos lo somos
y el vacío nos sitia con igual afecto doloroso.

Es posible el encontrarse de nuestras sombras
y hablarse de cosas comunes y graciosas
o el cruzarse en las calles mirándose desde los
ojos de cualquiera.

Hay un lugar en nosotros
desde el que nadie sabe quién escribió esto,
es decir se sabe lo poco importante que es
lo escrito
y el quien.

***

Eduardo Leiva Herrera (Santiago de Chile, 1968) Libro de Pasajeros. Santiago de Chile: Autoedición, 2013.

/

Fotografía del autor para el proyecto "Poesía beats y rockandroll"













martes, 15 de agosto de 2017

tristan tzara / agua salvaje













los dientes hambrientos del ojo
cubiertos de hollín de seda
abiertos a la lluvia
todo el año
el agua desnuda
oscurece el sudor de la frente de la noche
el ojo está encerrado en un triángulo
el triángulo sostiene otro triángulo

el ojo a velocidad reducida
mastica fragmentos de sueño
mastica dientes de sol dientes cargados de sueño

el ruido ordenado en la periferia del resplandor
es un ángel
que sirve de cerradura a la seguridad de la canción
una pipa que se fuma en el compartimiento de fumadores
en su carne los gritos se filtran por los nervios
que conducen la lluvia y sus dibujos
las mujeres lo usan a modo de collar
y despierta la alegría de los astrónomos

todos lo toman por un juego de pliegues marinos
aterciopelado por el calor y el insomnio que lo colora

su ojo sólo se abre para el mío
no hay nadie sino yo que tenga miedo cuando lo mira
y me deja en estado de respetuoso sufrimiento
allí donde los músculos de su vientre y de sus piernas inflexibles
se encuentran en un soplido animal de hálito salino
aparto con pudor las formaciones nubosas y su meta
carne inexplorada que bruñen y suavizan las aguas más sutiles

***
Tristan Tzara (Moineşti, 1896-París, 1963)
Versión de Aldo Pellegrini

/

pintura por Robert Delaunay

/

Eau sauvage

les dents affamés de l’oeil
couvertes de suie de soie
ouvertes à la pluie
toute l’année
l’aeau nue
obscurcit la sueur du front de la nuit
l’oeil est enfermé dans un triangle
ce triangle soutient un autre triangle

l’oeil au ralenti
croque dans sa bouche des morceaux de sommeil

le bruit ordonné á la péripherie de la lueur
est un ange
qui ser de serrure á la sûreté de la chanson
une pipe qu’on fume dans le compartiment de fumeurs
sur sa chair les cris se filtrent par les nerfs
qui conduisent la pluie et ses dessins
les femmes le mettent au comme collier
il fait la joie des astronomes

tout le monde le prend pour un jeu de plis marins
velouté par la chaleur et l’indomnie qui l’enlumine

son oeil ne s’ouvre qu’au mien
il n’y a qui aie peur quand je le regarde
il me met dans un état de souffrance respectueuse
la oú les muscles de son ventre et de ses jambes inflexibles
se renconrent dans un souffle animal d’haleine saline
j’écarte avec pudeur les formations nuageuses et leur cible
chair inexplorée polie et adoucie par les eaux trés fines

lunes, 14 de agosto de 2017

romeo murga / cuando seamos viejos













Cuando seamos viejos, todo este amor enorme
se irá por los caminos y brotará en los huertos,
y será una ilusión muy lejana y deforme
que enturbiará la paz de nuestros ojos muertos.

A la tarde, soñando con lo que ya no se ama,
mascaremos recuerdos de amor en el tabaco,
y el amor temblará como una débil llama
en nuestra carne vieja y en nuestros rostros flacos.

Todo el pasado claro se asomará a tus ojos
y dormirá en tus ojos una eterna agonía,
ya no nos dolerán ni guijarros ni abrojos
y apenas sufriremos de vivir todavía.

Sólo nos quedará la voz, y no la misma
con que hoy, serenamente, nos besamos de lejos.
De esta ternura inmensa que en nosotros se abisma,
¡cómo iremos a hablar, cuando seamos viejos!

***
Romeo Murga (Copiapó, 1904-San Bernardo, 1925) El canto en la sombra. Santiago de Chile: Tegualda, 1946.

domingo, 13 de agosto de 2017

maría monvel / había olvidado el amor













Habh olvidado el amor.
En mis recuerdos era un leño
que al arder, difundía suave calor.
Era un vino agridulce
mucho más sutil que embriagador.
Un máximo embeleso
y un dolor
más hipócrita goce que dolor.
¡Sé demasiado bien ahora
que habia olvidado el amor!
Ya lo tengo presente
dentro de mi. Clava en mi corazón
sus garfios y en mi lengua
se traban el dolor y el terror.
¡Oh, Dios mio, cuanto había olvidado el amor!
Tengo hiel en los labios
y su quemadura es atroz.
Es un leño encendido
que al arder, arde en desesperación.
se enturbian mis pupilas,
en mis labios secos se apaga la voz,
un cascabeleo de locura
me hace girar en derredor...
Caigo herida de muerte.. .
¿Quién logrará mi salvación?

***
María Monvel (Iquique, 1899-Santiago de Chile, 1936) Sus mejores poemas. Santiago de Chile: Nascimiento, 1934.

sábado, 12 de agosto de 2017

alfonso costafreda / los límites













Pienso en mis límites,
límites que separan
el poema que hago
del que no puedo hacer,
el poema que escribo
del que nunca podré escribir.
Límites también, en consecuencia,
de lo que amo
y de lo que nunca podré amar.

Límites de lo que quisiera decir
o ver o tener.
Palabras que daría
para descubrir, palabras para ayudar.
Límites del amor, palabras
insuficientemente valiosas,
en un desierto inacabable.

***
Alfonso Costafreda (Tárrega, 1926-Ginebra, 1974) Poesía Completa. Barcelona: Tusquets, 1990.

viernes, 11 de agosto de 2017

ezra pound / canto lxxxi













Zeus yace en el regazo de Ceres
Taishan es servido de amores
            bajo Citerea, antes de la salida
            del sol
y dijo: “Hay aquí mucho catolicismo –(pronunciado
            catolicismo)
            y muy poca religión”
y dijo: “Yo creo que los reyes desaparecen”
Ése fue el Padre José Elizondo
            en 1906 y en 1917
o cerca de 1917
            y Dolores decía: Come pan, chico, come pan,
Sargent la había pintado
            antes de descender
(i.e. si es que descendió)
            pero en aquellos días hacía bocetos rápidos,
impresiones de los Velásquez en el Museo del Prado
y los libros costaban una peseta,
            los candelabros de bronce en proporción
viento cálido venía de las ciénagas
            y escalofríos de muerte de las montañas.

Y después Bowers escribía: “pero tanto odio,
            que yo nunca concebí tal”
y los rojos de Londres no querían descubrir a sus “amigos”
            (i.e. “amigos de Franco”trabajando en Londres)
y en el Alcázar
cuarenta años después dijeron: “vuélvete a la estación a comer
puedes dormir aquí por una peseta”
            cencerros de cabra sonaron toda la noche
            y el ama sonrió: Eso es luto, ¡ja!
“llevo luto, mi marido está muerto”
cuando me dio papel para escribir
con un borde negro de media pulgada o más,
            digamos de cinco octavos, de la locanda
Llamamos a todo extranjero “franchute”
y el huevo se rompió en el bolsillo de Cabránez,
            haciendo historia de esta manera. Basil dice
que sonaron tambores durante tres días
hasta que todos los parches se rompieron
            (simple fiesta de aldea)
y por lo que hace a su vida en las Canarias…
Zarigüeya observó que los bailes portugueses de la localidad
se bailaban por los mismos bailarines en diferentes lugares
            en política bienvenida…
la técnica de las manifestaciones
            Cole estudió esto (no G. D. H., Horace)
“Encontrarás”, dijo el viejo André Spire,
que cada uno de ese consejo (Crédit Agricole)
tiene cuñado
            “Tú el uno, yo los pocos”
            dijo John Adams
hablando de miedos en abstracto
            a su volátil amigo el Sr. Jefferson
(Romper el pentámetro, ése era el primer empujón)
o como Jo Bard:         nunca se hablan,
si es panadero y conserje visiblemente
            es La Rouchefoucauld y de Maintenon audiblemente.

“Te cavero le budella”
            “La corata a te”
En menos que una época geológica
            dijo Henry Mencken
“Algunos cocinan, algunos no cocinan
            algunas cosas no pueden modificarse”
’Iugx.  .  .  .  . ’emòn potí dwma aòn andra
Lo que vale es el nivel cultural,
                gracias a Benin por esa mesa hecha de cajas de embalaje
                “no le diga a nadie que yo la hice”
                de una máscara fina como cualquiera en Frankfurt

“Te levantará del suelo”
                Ligero como la rama de Kuanon
Y al principio desilusionado con la miseria
el desnudo y despatarrado muelle, pero entonces vio las
altas ruedas del carruaje
                y se reconcilió,
George Santayana llegando al puerto de Boston
y conservó hasta el fin de su vida ese ligero ceceo
del español
                como una gracia casi imperceptible
como Muss la v por la u de Romaña
y dijo que el luto era un acto completo
repetido para cada nuevo condolente
subiendo a un clímax
y George Horace dijo que él “cogería a Beveridge”
            (el senador)
Beveridge no quería hablar ni escribir para los periódicos
pero George le pescó acampando en su hotel
y asediándole al almuerzo, desayuno y cena
            tres artículos
y mi padre siguió azadonando maíz
            mientras George se lo contaba,
atraviesa un terreno baldío
            donde a veces se veía un conejo del campo
o tal vez sólo uno escapado
¡AOI!
            hoja en la corriente
            en mis rejas ninguna Althea

Libretto

No obstante
Antes de que la estación muriera de frío
Llevada sobre un hombro de céfiro
Me levanté a través del cielo áureo
            Lawes y Jenkyns guarden tu descanso
            Dolmetsch siempre tu huésped sea,
¿Ha templado la madera de la viola
Para reforzar tanto los graves         como los agudos?
¿Nos ha curvado la caja del laúd?
            Lawes y Jenkyns guarden tu descanso
            Dolmetsch siempre tu huésped sea,
¿Has creado ánimo tan aéreo
            Para atraer la hoja de su raíz?
¿Has encontrado       una nube        tan ligera
            Que no pareciera ni niebla ni sombra?

            Entonces clárame, dime bien
            Si Walker cantaba o Dowland tocaba.

            Tus dos ojos me mataron de repente
            La belleza de ellos no aguantaba

y durante 180 años casi nada.

Ed ascoltando al legier mormorio
            llegó entonces nueva sutileza de ojos a mi tienda,
ya fuera de espíritu o hipóstasis,
            pero lo que la venda oculta
o en el carnaval
            ni ningún par mostró enojo
            Vio sólo los ojos y la actitud entre los ojos,
color, diástasis,
            descuidado o desprevenido no tenía el
            espacio entero de la tienda
ni había lugar para el completo EidwV
traspasar, penetrar
proyectando sólo la sombra más allá de las otras luces
            claro de cielo
            mar de noche
            verde de la charca de la montaña
            brillaba de los ojos sin máscara
            en el espacio de media máscara.

Lo que bien amas perdura,
            lo demás es escoria
De lo que bien amas no te privarán
Lo que bien amas es tu herencia verdadera
¿Mundo de quién, o mío o de ellos o de nadie?
Primero vino lo visto, entonces así lo palpable
            Elysium, aunque fuera en las salas del infierno,
Lo que bien amas es tu verdadera herencia
De lo que bien amas no te privarán

La hormiga es un centauro en su mundo de dragón.
Humilla tu vanidad, no fue el hombre
El que hizo el valor, o el orden, o la gracia,
            Humilla tu vanidad, digo, humíllala.
Aprende del mundo natural el lugar que te puede corresponder
En invención a escala o verdadero arte,
Humilla tu vanidad,
            Paquin ¡humíllate!
El casco verde ha sobrepasado tu elegancia.

“Domínate a ti mismo y entonces te acatarán”
            Humilla tu vanidad.

Eres can golpeado bajo el granizo,
Urraca hinchada al veleidoso sol,
Medio negra, medio blanca
Y ni siquiera distingues el ala de la cola
Humilla tu vanidad
            Cuan pequeños tus odios
Alimentados en la falsedad,
            Humilla tu vanidad,
Apresurado en destruir, avaro en caridad,
Humilla tu vanidad,
            digo, humíllate.

Pero el haber hecho en vez del no hacer nada
            esto no es vanidad
El haber, con decencia, llamado
Para que Blunt abra
            El haber recogido del aire una viva tradición
o de un magnífico ojo anciano la llama invicta
Esto no es vanidad.
            Aquí el error está todo en lo que no se hizo,
todo en la timidez que titubeó…

***
Ezra Pound (Hailey, 1885-Venecia, 1972)
Versión de José Vázquez Amaral

/

Zeus lies in Ceres’ bosom
Taishan is attended of loves
                        under Cythera, before sunrise
And he said: “Hay aquí mucho catolicismo—(sounded
                                                            catolithismo
                      y muy poco reliHion.”
and he said: “Yo creo que los reyes desparecen”
(Kings will, I think, disappear)
This was Padre José Elizondo
                                        in 1906 and in 1917
or about 1917
                and Dolores said: “Come pan, niño,”   eat bread, me lad
Sargent had painted her
                                        before he descended
(i.e. if he descended 
                but in those days he did thumb sketches,
impressions of the Velázquez in the Museo del Prado
and books cost a peseta,
                         brass candlesticks in proportion, 
hot wind came from the marshes
       and death-chill from the mountains. 
And later Bowers wrote: “but such hatred,
       I have never conceived such”
and the London reds wouldn’t show up his friends
                        (i.e. friends of Franco
working in London) and in Alcázar
forty years gone, they said: go back to the station to eat
you can sleep here for a peseta”
               goat bells tinkled all night
               and the hostess grinned: Eso es luto, haw!
mi marido es muerto
                 (it is mourning, my husband is dead)
when she gave me a paper to write on
with a black border half an inch or more deep,
       say 5/8ths, of the locanda
“We call all foreigners frenchies”
and the egg broke in Cabranez’ pocket, 
                thus making history. Basil says
they beat drums for three days
till all the drumheads were busted
                 (simple village fiesta)
and as for his life in the Canaries…
Possum observed that the local portagoose folk dance
was danced by the same dancers in divers localities
                in political welcome…
the technique of demonstration
                Cole studied that (not G.D.H., Horace)
“You will find” said old André Spire,
that every man on that board (Crédit Agricole)
has a brother-in-law
                        “You the one, I the few”
                        said John Adams
speaking of fears in the abstract
         to his volatile friend Mr Jefferson. 
(To break the pentameter, that was the first heave)
or as Jo Bard says:   they never speak to each other,
if it is baker and concierge visibly
               it is La Rouchefoucauld and de Maintenon audibly.
“Te cavero le budella”
                              “La corata a te”
In less than a geological epoch
                                      said Henry Mencken
“Some cook, some do not cook
       some things cannot be altered”
’Iugx.  .  .  .  . ’emòn potí dwma aòn andra
What counts is the cultural level,
        thank Benin for this table ex packing box
        “doan yu tell no one I made it”
                      from a mask fine as any in Frankfurt
“It’ll get you offn th’ groun”
                      Light as the branch of Kuanon
And at first disappointed with shoddy
the bare ram-shackle quais, but then saw the 
high buggy wheels 
                      and was reconciled,
George Santayana arriving in the port of Boston
and kept to the end of his life that faint thethear
of the Spaniard
                        as grace quasi imperceptible
as did Muss the v for u of Romagna
and said the grief was a full act
              repeated for each new condoleress
working up to a climax.
and George Horace said he wd/ “get Beveridge” (Senator)
Beveridge wouldn’t talk and he wouldn’t write for the papers
but George got him by campin’ in his hotel
and assailin’ him at lunch breakfast an’ dinner
                        three articles
and my ole man went on hoein’ corn
       while George was a-tellin’ him,
come across a vacant lot
                where you’d occasionally see a wild rabbit
or mebbe only a loose one
            AOI!
            a leaf in the current
                                           at my grates no Althea
______
libretto
______

Yet
Ere the season died a-cold
Borne upon a zephyr’s shoulder
I rose through the aureate sky
                               Lawes and Jenkyns guard thy rest
                               Dolmetsch ever be thy guest,
Has he tempered the viol’s wood
To enforce   both the grave   and the acute? 
Has he curved us the bowl of the lute?
                               Lawes and Jenkyns guard thy rest
                               Dolmetsch ever be thy guest
Hast ’ou fashioned so airy a mood
       To draw up leaf from the root?
Hast ’ou found   a cloud   so light
        As seemed neither mist nor shade?
            
                                Then resolve me, tell me aright
                                 If Waller sang or Dowland played
            
                   Your eyen two wol sleye me sodenly
                    I may the beauté of hem nat susteyne

And for 180 years almost nothing. 

Ed ascoltando al leggier mormorio
        there came new subtlety of eyes into my tent,
whether of the spirit or hypostasis,
            but what the blindfold hides
or at carneval
                                  nor any pair showed anger
            Saw but the eyes and stance between the eyes,
colour, diastasis,
      careless or unaware it had not the
   whole tent’s room
nor was place for the full EidwV
interpass, penetrate
      casting but shade beyond the other lights
              sky’s clear
              night’s sea
              green of the mountain pool
              shone from the unmasked eyes in half-mask’s space. 
What thou lovest well remains, 
                                                  the rest is dross
What thou lov’st well shall not be reft from thee
What thou lov’st well is thy true heritage
Whose world, or mine or theirs
                                            or is it of none? 
First came the seen, then thus the palpable
        Elysium, though it were in the halls of hell,
What thou lovest well is thy true heritage
What thou lov’st well shall not be reft from thee

The ant’s a centaur in his dragon world.
Pull down thy vanity, it is not man
Made courage, or made order, or made grace,
         Pull down thy vanity, I say pull down.
Learn of the green world what can be thy place
In scaled invention or true artistry,
Pull down thy vanity,
                                        Paquin pull down!
The green casque has outdone your elegance.

“Master thyself, then others shall thee beare”
       Pull down thy vanity
Thou art a beaten dog beneath the hail,
A swollen magpie in a fitful sun,
Half black half white
Nor knowst’ou wing from tail
Pull down thy vanity
                        How mean thy hates
Fostered in falsity,
                        Pull down thy vanity,
Rathe to destroy, niggard in charity,
Pull down thy vanity,
                       I say pull down. 

But to have done instead of not doing
                     this is not vanity
To have, with decency, knocked
That a Blunt should open
               To have gathered from the air a live tradition
or from a fine old eye the unconquered flame
This is not vanity. 
         Here error is all in the not done,
all in the diffidence that faltered  .  .  . 

jueves, 10 de agosto de 2017

rodrigo lira / 4 tres cientos sesenta y cincos y un 366 de onces









dada la continuidad de la ausencia de tibieza
considerando la permanencia de las carencias y
... las ansiedades que se perpetran cotidianamente
... y el frío sobre todo en especial o solo
... o el frío completo en salchicha con mayonesa viscosa
... seminal y estéril
... la sábana sucia que cubre monstruosos ayuntamientos
... la escasez de radiación solar
.......... (lo poco que alcanza a llegar a través del monóxido de
carbono, el humo de chimeneas pastizales que se
queman en febrero cigarrillos chimeneas tubos de escape tubos chimeneas humo)
.......... de la que tiene que atravesar además esa sucia
sábana que cubre apenas -como mera sábana polucionada-
esas teratológicas cópulas esos coitos de ahítos
................................. esas violaciones y estupros
.................................................... y las ondas
de radio en amplitud o frecuencia modulada
las largas y las cortas ondas
.............................. de radio de televisión o télex
las ondas que emiten las antenas emisoras
....................................y las receptoras, que también reciben
esas ondas que la luz solar debe atravesar
.........................................lo inconcebiblemente banal y eficazmente hipnógeno
de lo que se radiodifunde y televe
..................................lo opaco de los cristales
......................................"color humo por dentro
....................................espejo color bronce hacia el exterior"
.................................. los cristales que dispersan los que refractan
los que cromatizan la luz ..... lo exiguo de la tasa de luz que alcanza
a corresponder per cápita, por cabeza
...........................................lo gachas que se encuentran estas últimas
...........................................(lo desigual de la tasa de luz de cabeza a cabeza)
............................................lo sucio de la sábana que lo cubre todo
...............................................................................o casi todo
..........................................................................o hartas cosas
........................................ (la sucia sábana no se cubre a sí misma)
considerando también los olores a añejo, a podrido a quemado o
infectado
..........................................parece que como que hubiera que hacer alguna cosa.

........................................Aunque cabe la posibilidad de que sea mejor
...........................................................no hacer nada
...........................................................nada hacia la izquierda
............................................................ nada
......................................................hacia
....................................................la
......................................... derecha
...............................................nada hacia adelante tampoco, más aún,
especialmente, nada hacia adelante -está la inercia
.............................................................nada hacia atrás, no se puede,
trate usted de nadar hacia atrás, no se puede, la historia
.......................................................................no retrocede
-está la historia
-están las bayonetas de la historia bajo las banderas de la historia
-está la sangre en las bayonetas de la historia bajo las banderas de la
.......................................................................................historia
.......................................coagulada ya, reseca, más bien, como yesca
yesca de sangre sobre las bayonetas de la historia bajo las banderas de
............... la historia -de lo que está atrás
.......................(no fumar, peligro grave de incendios, demasiada yesca
-sangre seca- atrás)
Nada tampoco ni hacia arriba ni hacia abajo ni hacia adentro ni hacia .................................................................................... afuera
.............................nada hacer, no hacer nada
-cruzarse de brazos -sentarse en posición de loto -tirarse boca arriba y
-mirar el cielo
............................(nada hacia arriba; no pensar en escalar el cielo)
-tirarse boca abajo, la mejilla pegada al suelo
...........................................o hundida en el barro
(no pensar en hundirse; no evitar hundirse)
...............................al menos cabe la posibilidad de que eso fuera lo que
parece que como que hubiera que hacer, la cosa aquella
........................................................................... alguna
cabe la posibilidad de que eso fuese: alejarse de la acción
.......... con las manos en los bolsillos
o con las manos tomadas a la espalda
o con las manos enlazadas en la nuca
...................... o levantadas ..... mirando el suelo
................................................a patadas con las piedras
................................................aplastando descuidadamente
eventuales caracoles cuncunas, lombrices o cucarachas distraídos-as
............................. -jamás tomarán venganza-
alejarse de la acción: irse despacio a ninguna parte
................................pues no hay donde irse
................................pero hay que irse
-tal vez, digo yo, como que habría que irse....... -a ninguna parte
-tal vez haya donde esconderse, no sé
................................................ en todo caso sería preciso
no salir a la calle:
........................los sujetos que en París rayaron las murallas de mayo
graficaron las palabras francesas que traducidas al idioma español dicen:
.................... la/acción/está/en/la/calle
..........................................................y si hay que alejarse de la acción
sería inconsecuente tomar una micro
.......................tomar el metro, una liebre, un bus urbano o interurbano,
tomar
bebidas alcohólicas o de cola o cafecitos

habría que morirse de hambre, pienso
secarse en una esquina poco frecuentada o en un sótano oscuro, digo yo
porque las torres Santa María podrán ser los edificios más altos de
Chile
pero haga usted la prueba de subir
-tendrá que ir bien vestido-
tomar uno de esos ascensores que adivinan el pensamiento o poco menos
y que son tan veloces como altas son esas torres
y llegue lo más arriba que pueda, hasta la terraza, si es posible
actúe hacia arriba para después tirarse y no hacer nada
abastecido de libertad por lo libre de la caída
que te hace abrir los brazos y planear, acercándote a tu reflejo
que se acerca hacia arriba desde los espejos de agua
con tu imagen multiplicada por los vidrios que por fuera son espejos
que reflejan tu imagen cayendo de modo que tú no alcanzas a ver adentro
pero que no les impide verte dentro pasar volando en caída libre
-y creerían que pasó un ángel y habrá un momento de silencio...-


No podrás: alguien sujetará a usted del brazo justo a tiempo
............. alguien o algo, algún robot por ejemplo
..............y alguien -o algo- llamará a una ambulancia
a través de un citófono a un teléfono que llamará a una central que
.......... pasará el mensaje a otro teléfono etcétera
todo a velocidad escasamente menor que la de la luz o la de tu cuerpo
en la frustrada caída
.................probablemente el radio del radiopatrulla no será necesario
habrá una sirena o tal vez no, habrá en todo caso un silencio eléctrico
de terapia de choque ...... tac/
....................................... un vacío
................................................y un hueco para ti en una terapia
............................de grupo
..................... de un grupo cualquiera
y sean cuales fueren los cuentos que te cuenten, desgraciado
la cuenta que te pasen
...........................saldrás del hospital clínica o centro médico
tarareando gracias a la vida
motivado por los avisos y consejos de la publicidad que nos ayuda a
vivir mejor
...............desde la radio o el televisor
que tanto habrán contribuido a tu curación
.................................rumbo al local más cercano
................................ en que se pueda jugarle una cartilla a la
Polla Gol ....................a cambio de un templo donde sacrificar un
gallo a Esculapio ........que ya no se usan esas cosas, pues hombre
.................................para después entretenerse un rato mascando
chicle de un sabor predilecto
......................................en la máquina de pinbol o pinpong electrónico
..... O sea que en resumen habría que morirse sin alharaca
..... sin pánico cundiendo ni cúnico pandiendo ni púnico candi endo

suave, callado el loro
.........................-- morirse
o quedarse en la vereda como un pedazo más grande que el promedio
...................................de basura
saboreando algo así como un candi masticable o un goyak
y hasta incluso un caramelo bueno, de Serrano, o fino,
de Ambrosoli,
................pero muriéndose,
....................................... muriéndose sin alharaca,
......................................................muriéndose.

***
Rodrigo Lira (Santiago de Chile, 1949-1981) Proyecto de Obras Completas. Santiago de Chile: Universitaria, 1981.

miércoles, 9 de agosto de 2017

rabindranath tagore / el jardinero, xlvi













Me dejaste y seguiste tu camino.
Creí que estaría triste sin ti y que pondría en mi corazón solamente tu imagen labrada en una canción de oro.
Pero, ay, mala suerte mía, el tiempo es breve.

La juventud se marchita año tras año; los días de primavera son fugaces; las frágiles flores se mueren para nada, y el sabio me advierte que la vida es sólo una gota de rocío en la hoja de un loto.
¿Habré de olvidarme de todo esto para quedarme contemplando a la que me ha vuelto la espalda?
Esto sería duro y necio, pues el tiempo es breve.

Venid, pues, noches de lluvia mías, con vuestros pies pequeños; sonríe, dorado otoño mío; ven, atolondrado abril, que lanzas besos por doquier.
¡Ven tú, y tú, y tú también!
Amores míos, sabéis que somos mortales. ¿Es sensato destrozarse el corazón por una que se lleva el suyo lejos? Pues el tiempo es breve.

Es dulce sentarse en un rincón y escribir en verso que eres todo mi mundo.
Es heroico abrazarse al dolor y decidir no ser consolado.
Pero un nuevo rostro se asoma a mi puerta y levanta sus ojos a los míos.
No puedo sino secarme las lágrimas y cambiar el aire de mi canción.
Pues el tiempo es breve.

***
Rabindranath Tagore (Calcuta, 1861-1941)
Versión de Enrique López Castellón