Anuncio

El 11 de diciembre de 2025, la comparecencia infinita terminó su fase de actualizaciones diarias. Agradecemos a todxs lxs lectorxs e colaboradorxs. Sin su apoyo no habría seguido adelante este proyecto que nació en abril de 2017 y que vivió un período de inactividad desde el 12 de diciembre de 2018 hasta el 10 de febrero de 2020. Este año homenajeamos también a Jorge Aulicino, escritor y poeta argentino que nos ha dejado el pasado julio, sin el cual no habríamos llegado al formato de actualizaciones diarias. La siguiente fase de la comparecencia infinita será de actualizaciones inusitadas, destellos e intermitencias en la bandeja de correo de cientos de suscriptorxs y de miles de lectorxs. A lxs colaboradorxs pedimos que sigan enviando material, será, como siempre, bien recibido. Volveremos, pero a pequeñas dosis esporádicas. Hasta cuando sea, gracias totales.

lunes, 18 de enero de 2021

hilda doolittle / de "definición hermética"













1

¿Por qué viniste
a perturbar mi declive?
estoy vieja (era vieja hasta que llegaste);

la rosa más roja se deshoja,
(lo que es ridículo
en este tiempo, este lugar,

inopinado, imposible,
incluso un poco escandaloso),
la rosa más roja se deshoja;

(nadie puede detener eso,
ninguna amenaza inmanente desde el aire,
ni aun el clima,

royendo nuestra fruta de verano),
la rosa más roja se deshoja,
(tienen que tomar eso en cuenta).

~

2

Llévame a cualquier parte, cualquier parte;
camino hacia ti,
Dogo – Venecia –

tú eres toda mi hacienda;
me ocultaría en tu mente
como un niño en el ático,

¿qué encontraré ahí?
Religión o majia – ¿ambas? ¿ninguna?
¿una o la otra?, juntas, equiparadas,

pareadas, exactamente las mismas,
iguales en poder, juntas pero separadas,

el ámbar de tus ojos.

~

5

Venecia – ¿Venus?
Ésta debe ser mi postura,
mi estación: aunque apartaste a un lado

mi verso,
no puedo escapar de él,
lo he intentado;

cierto, era “fascinante . . .
si puedes aguantar su preciosismo”,
escribiste de lo que escribí;

¿por qué debo escribir?
No te va a importar esto,
pero Ella descorre el velo,

desata mis ojos,
manda,
escribe, escribe o muere.

~

11

Es corazón,
esta no sal, ellos dicen,
puedes irte en cualquier momento,

pero eso puede ser dicho de cualquiera de nosotros,
así que debo apartarme, mantenerme lejos;
un íntimo de mi juventud,

un poeta escribió,
tan lenta es la rosa en abrir*,
así que contemplo estas palabras

y la dedicación latina,
y descifraría mi propio destino;
sé que el poeta del que hablo

no dudaría,
quizá la humildad es más propia
de una mujer;

la rose est la fleur du creuset**,
y el creuset es el crisol
que llamé un plato bajo cuando escribí,

entraré en tus sentidos
a través de resina quemada
y piñas de pino.

* El verso es de Ezra Pound, Canto 106
** “la rosa es la flor del crisol”: al parecer, H.D. lo tomó de Robert Ambelain, op. cit.

***
Hilda Doolittle (H.D.) (Bethlehem, 1886-Zürich, 1961)
Versiones de Juan Pablo Pereira

No hay comentarios.:

Publicar un comentario